El Presidente Gabriel Boric también emplazó a la derecha en DDHH, y anunció la expropiación terrenos de Colonia Dignidad. Además respaldó la acción legal que tomó Sudáfrica contra el Estado de Israel a propósito de sus acciones bélicas en Gaza.
Pasadas las 11 de la mañana el Presidente de la República Gabriel Boric dio inicio a su tercera Cuenta Pública y enfocó su discurso en los logros de esta administración, principalmente en materias económicas y en seguridad. Si bien, la tensión del discurso estaba en esos avances, sus proyecciones, en la reforma de pensiones, en la solución del CAE y en el debate que arrojó la semana sobre el obstruccionismo, el Primer Mandatario sorprendió con dos anuncios que provocaron la salida de algunos parlamentarios del salón de honor: la urgencia al proyecto de Ley de eutanasia y el ingreso del proyecto de Aborto Legal.
El Presidente Boric usó parte de sus primeras palabras para reconocer al fallecido ex Presidente Sebastián Piñera, lo que generó aplausos transversales. También recordó obras de casi todos los exmandatarios que lideraron el país desde el retorno de la democracia. Luego expresó la necesidad de buscar entendimientos.
Asimismo, aludió a que las demandas del estallido social seguían vivas, y que los proceso constituyentes fracasados dejaron el siguiente aprendizaje:
“Cuando nos atrincheramos en posiciones irreductibles, negando la validez de quien circunstancialmente está en minoría, y dejando de dialogar las legítimas diferencias para construir en conjunto, el país no avanza y el péndulo cambia”, dijo en un tono conciliador. Hasta ese momento, los avances entregados en materia de seguridad se llenaron de aplausos, se refirió a temas que la oposición había planteado como, por ejemplo, la migración ilegal.
La primera tensión se dio cuando el Presidente, mientras anunciaba su eje económico, dijo que “hemos creado más de medio millón de nuevos empleos”. En ese momento el diputado Sergio Bobadilla (UDI), quien estaba sentado a algunos metros, interrumpió el discurso y gritó a viva voz: “Son empleos públicos”. El Presidente lo paró en seco y le dijo “No señor, no mienta”, haciendo un gesto de negación con su mano”.
De ahí en adelante los aplausos se hicieron recurrentes con los anuncios económicos y con los avances en los sistemas de cuidados. En un momento el Presidente se detuvo. Explicó que había recibido una carta escrita a mano -de muchas de las que llegan a su despacho- de Susana Moreira. “Me escribió para compartirme lo que significa padecer a diario dolores físicos atroces por una distrofia muscular que no le permite tener una vida digna. En su carta, Susana me solicita que autorice su muerte asistida”, reveló la primera autoridad.
En su discurso aprovechó de responderle a Moreira: “Lo que me pides no está dentro de mis atribuciones, pero en tu nombre y en los de
tantos otros invito a este Congreso a no evitar este debate”. Ahí, el Presidente anunció que le dará urgencia e impulsará el proyecto de ley de eutanasia y cuidados paliativos que está en el Senado. “Aprobar esta ley es un acto de empatía, respeto y responsabilidad”, sentenció la autoridad máxima del país.
El Congreso se llenó de aplausos más fuertes de los que se habían escuchado hasta ese momento, pero la ovación y conflicto llegó después.
Seguido el tema de la eutanasia, se refirió a los derechos sexuales y reproductivos que terminó con parlamentarios retirándose del Salón de Honor el Congreso.
Comenzó revelando que se hizo una evaluación de la política del aborto en tres causales implementada el 2017 durante el Gobierno de Michelle Bachellet. Sobre eso, aseguró que el Gobierno ingresó un nuevo reglamento a la Contraloría para asegurar el acceso a un derecho establecido en la ley y así que la objeción de conciencia personal no obstaculice el aborto en estas tres causales.
En el Salón de Honor llovieron los aplausos. Sin embargo, se sumaron los gritos de apoyo más efusivos cuando, como Presidente de la República, afirmó estar convencido de la necesidad de dar un debate democrático en materia de derechos sexuales y reproductivos. Por eso es que, durante el segundo semestre de este año, ingresaremos un proyecto de ley de aborto legal, que someteremos a la discusión correspondiente, siempre con el compromiso que anima a nuestro gobierno: avanzar y no retroceder. Las mujeres de Chile se lo merecen”.
El Congreso se llenó de aplausos, pero hubo quienes no soportaron el anuncio y un grupo de parlamentarios de oposición se retiró de la sala. Entre ellos: Henry Leal (UDI), Eduardo Durán (RN), Leonidas Romero (Partido Republicano), Daniel Lilayu (UDI), Sara Concha (Partido Social Cristiano), Francesca Muñoz (Partido Social Cristiano).
Estos salieron en un comienzo, pero a medida que avanzó el discurso, salieron entre 20 y 15 diputados de oposición.
Entre las materias que abordó sobre Derechos Humanos, el Presidente Boric dio cuenta de que se han hecho gestiones en conjunto con el Gobierno alemán “para convertir un antiguo espacio de horror y muerte en un lugar de memoria y futuro”.
Esta colaboración se traduce en que “esta semana dimos inicio al proceso expropiatorio de parte de los terrenos de la ex Colonia Dignidad en Villa Baviera, entre ellos, de la que fuera la casa de Paul Schäefer”, dijo el Presidente. Además, agregó que “este es un paso relevante en el camino a consagrar el lugar como un espacio de memoria. Así, desde el sur de Chile hasta Alemania, en una sola voz le decimos al mundo: ¡Nunca más!”.
Otro tema que no estaba en el radar de la discusión pública fue el tema de las miles de muertes de civiles palestinos a manos del Estado de Israel. Con la ausencia del embajador israelí -debido a que la autoridad celebra el shabat y por ende no trabaja el día sábado- el Primer Mandatario dijo que “tengo el deber de referirme hoy a la crítica situación en la Franja de Gaza”.
La cuenta de los 35 mil muertos en Gaza, “requieren de una firme respuesta de la comunidad internacional”, dijo el Primer Mandatario. En esa línea, recapituló las medidas tomadas por el Gobierno en esta materia, como la entrega del apoyo humanitario a Palestina, el llamado a consulta de nuestro embajador en Israel, y de presentar junto a México una remisión de la situación en Palestina ante la Corte Penal Internacional.
Sin embargo, reveló que “Chile se hará parte y respaldará el caso que presentó Sudáfrica contra Israel ante la Corte Internacional de Justicia de la Haya, en el marco de la Convención sobre Genocidio de la ONU”.
Inscríbete en el Newsletter +Política de El Mostrador, súmate a nuestra comunidad para informado/a con noticias precisas, seguimiento detallado de políticas públicas y entrevistas con personajes que influyen.