Dos años lleva el enfrentamiento entre el Tren de Aragua y “Los Orientales”, donde además participan otros dos brazos del primer grupo: “Los Valencianos” y “La dinastía Alayón”. Los enfrentamientos entre todos ellos dejaban, hasta la semana pasada, casi una decena de muertos en el país.
Pese a que aún falta mucho por descubrir en lo relativo al más grave de los hechos criminales acaecidos el fin de semana largo en la Región Metropolitana, el quíntuple homicidio de Lampa, la principal tesis policial al respecto se relaciona con una guerra entre el Tren de Aragua (TDA) “original” (que hoy se autodenomina “Los piratas de Aragua”) y una de sus facciones, “Los Orientales”, un grupo criminal nacido hacia 2011 en la cárcel de Puente Ayala, en Anzoátegui, al oriente de Venezuela.
Según distintas fuentes que participan de las investigaciones, “Los Orientales” estaban “alineados” con el TDA, es decir, operaban como una franquicia del mismo en Santiago, especialmente en lo relativo a la trata de personas con fines de explotación sexual. De hecho, “Los Orientales”, traían menores de edad desde Venezuela y Colombia hasta Chile, a fin de obligarlas a trabajar como prostitutas, sobre todo en el sector céntrico de Santiago, lo que es actualmente indagado en una causa reservada por la fiscal especializada en trata de personas, Carolina Suazo, indagatoria en la cual hay una decena de detenidos.
Sin embargo, como lo evidencian varias investigaciones que se llevan en distintas fiscalías, a inicios de 2022 se rompió la armonía entre ambos grupos, cuando el TDA –encabezado en ese entonces por Larry Amaury Álvarez Núñez (“Larry Changa”, actualmente detenido en Colombia)– acusó a “Los Orientales” de haberlos defraudado con la “vacuna”, como denominan al impuesto que deben pagar a la organización mayor, con el fin de ocupar su marca y operar en los territorios que esta les asigna, en este caso, el centro de Santiago.
La guerra estalló formalmente en mayo de 2022, cuando el Tren de Aragua secuestró a varios líderes de “Los Orientales”, a quienes liberaron tras el pago de una importante suma de dinero, aún no precisada, por el “saldo” de lo adeudado, plagio que fue perpetrado por sujetos pertenecientes al grupo de secuestradores encabezado por Wilken Romero, más conocido como “El Caracas”, quien actualmente se encuentra en prisión preventiva en el Recinto Especial Penitenciario de Alta Seguridad (Repas).
Sin embargo, entre tipos duros las afrentas no se olvidan tan fácilmente y así fue como “Los Orientales” decidieron reaccionar con algo que ellos estimaron proporcional al agravio que habían recibido, por lo cual, en la madrugada del 30 de junio de ese año, en el estacionamiento subterráneo del edificio ubicado en Huérfanos 1400, emboscaron al jefe de la “plaza de las mujeres” (es decir, el encargado de la prostitución) en Santiago por parte del TDA, Frankeixis Vargas, quien murió luego de recibir seis disparos.
Según un reportaje de Canal 13, el máximo “patrón” de “Los Orientales”, conocido como “Rosma”, fue quien encabezó el ataque, cuyas repercusiones no se dejaron esperar, pues horas más tarde un grupo de sicarios conformado por miembros del TDA y otra de sus facciones, “La dinastía Alayón”, atacó en Bajos de Mena (Puente Alto) un vehículo en el cual creían que estaban el subjefe de “Los Orientales”, Gabriel José Rondón Díaz –más conocido como “El Fagua”–, y el líder de “la plaza de las mujeres” de ese grupo, Emanuel Tesana.
Como es habitual en el Tren de Aragua, los sicarios grabaron un video del momento en que disparan a las víctimas, que se encontraban al interior de un automóvil Suzuki color azul. Dicho video fue encontrado en un teléfono celular que se cayó en el sitio del suceso y que fue hallado por la PDI, en el cual se escucha decir al pistolero “¡maldito sapo, toma, maldito, toma!”, mientras dispara varias veces contra un hombre que está inmóvil, dentro del Suzuki.
Luego, el mismo sujeto grita “¡la bicha, la bicha!”, refiriéndose a la pistola del muerto. Ante ello, se introduce en el automóvil para buscar el arma, momento en que cae en la cuenta de que cometieron un grave error, pues, al mover al asesinado, dice espantado “¡ese no es Fagua, mano, ese no es Fagua!”.
En efecto, en ese vehículo no estaba ninguno de los líderes de “Los Orientales”, sino dos “soldados”, identificados como Leminger Duarte y Juan Rafael Peña. El asesinato fue perpetrado por dos sujetos que posteriormente participaron en un doble homicidio en Temuco, donde las víctimas fueron otros dos integrantes de “Los Orientales”, ejecutados luego de que les robaran una cifra cercana a los 6 mil dólares.
El 16 de agosto de 2022 se registró otro episodio en esta guerra fratricida, cuando tres venezolanos que se encontraban al interior de un auto, en calle Jotabeche (Estación Central), fueron tiroteados desde otro móvil. En el mismo sitio perdió la vida Wilson Rafael Colmenares González, de 22 años, mientras que Carlos Vicente Marín Oveda, de 32, murió después, en la Posta Central. La mujer que los acompañaba resultó ilesa. Ambas víctimas, según reportes policiales, eran miembros de otra facción del TDA, “Los Valencianos”, que se habían pasado a “Los Orientales”.
Todo ello se vengó el 9 de abril del año pasado, cuando –al igual que este martes– se realizaba una fiesta clandestina en una parcela de Batuco, en la misma comuna de Lampa, en la cual desconocidos que llegaron en tres vehículos acribillaron a las víctimas, que salían del lugar en un SUV, lo que les costó la vida Marco Antonio Monasterios Isturis y su hijo Maryaikol José Monasterios Yáñez, así como a Leonardo José Guilarte Acosta, Valeria de Andrade Romero y Edgar Javier Fernández Velásquez. Otros dos sujetos llegaron heridos hasta distintos centros asistenciales, entre ellos, Helson Jiménez, quien, no obstante ser miembro del TDA, estaba invitado a la fiesta electrónica que allí realizaban “Los Orientales”.
Pese a que aún no hay detenidos en ese caso, que es investigado por la Fiscalía Local de Iquique (debido a que en ese entonces todas las causas del TDA se concentraban en esa Fiscalía), fue cometido por grupos pertenecientes a la célula del Tren de Aragua de Viña del Mar.
El doble crimen de Batuco se produjo solo cuatro días después que sujetos pertenecientes a una célula del TDA que manejaban la “plaza de las mujeres” en Concepción y al mismo tiempo estaban encargados de administrar varios cités en el Barrio Matta, asesinaran en la zona sur del centro de Santiago al suboficial de Carabineros Daniel Palma.
De acuerdo con una investigación realizada por Mega, peritajes balísticos encargados por la fiscal Tania Sironvalle determinaron que una de las armas usadas en Batuco fue además utilizada en el crimen de Colmenares y también en el asesinato del policía, además de otro homicidio ocurrido en 2021 en Rancagua.
Pocos días después del quíntuple homicidio, en tanto, la Fiscalía de Iquique detuvo en esa ciudad y en Alto Hospicio a siete miembros del TDA, a quienes les fueron decomisados 144 kilos de drogas. Además, se determinó que los imputados eran los autores del secuestro y homicidio de una pareja, que previamente fue torturada en una casa que el grupo mantenía para ello en el sector de La Mula. Pero eso no es todo. En poder del mismo grupo se encontró uno de los automóviles usado en el asesinato de Batuco.
De ese modo, dada la evidencia balística y vehicular, así como los nombres que se manejan respecto de los eventuales autores en el quíntuple homicidio del año pasado, se confirmaron los vínculos entre las células del TDA de Iquique con las de Viña del Mar, Santiago y Concepción.
En función de todo ello, fuentes vinculadas al quíntuple asesinato ocurrido el martes en Lampa, indicaron a El Mostrador que “si bien no se puede descartar nada, lo primero que hay que hacer en este caso es determinar la filiación, si la tienen, de todos quienes estaban en la fiesta”, con el fin de determinar si –como se cree– había entre ellos miembros del TDA, que pudieron haber sido objeto de una venganza por parte de “Los Orientales”.
En ese contexto se explica la solicitud de reserva efectuada por el fiscal Ernesto González al Juzgado de Garantía de Colina, ayer, instancia en la cual el persecutor además pidió una ampliación de detención de tres días respecto de los tres hombres que se encuentran arrestados (Evinson Donnys Camacho, Greimer Alexander Delgado Meza y Pedro Cedeño Peña).
Durante ese plazo, además de establecer bien los delitos por los cuales serían acusados (porte de arma prohibida, receptación de vehículos y obstrucción a la justicia), se estudiarán los eventuales nexos que ellos puedan tener con alguna facción del TDA, al tiempo que personal de la Brigada de Homicidios Centro Norte sigue estudiando el sitio del suceso, interrogando a los sobrevivientes y revisando las cámaras y pórticos cercanos, a fin de determinar los desplazamientos de los homicidas.