PAÍS
Créditos: Agencia Uno
La diputada Pérez fue una de las invitadas a la gira presidencial que realizó el Mandatario a Paraguay. Su aparición resulta nada casual. Coincide con una renovación de votos, ahora como militante del FA. Su presidenta, Constanza Martínez, advirtió que tendrán “tolerancia cero” con la corrupción.
El Frente Amplio (FA), aunque es un partido nuevo, tiene una historia detrás que no gusta y que el año pasado mantuvo contra las cuerdas al colectivo de tiendas que lo conforman. El caso Convenios supuso un duro golpe para el movimiento y, sobre todo, para la diputada Catalina Pérez, a quien se le suspendió la militancia en Revolución Democrática (RD) por sus vínculos con el formalizado por fraude al fisco, Daniel Andrade, su expareja y uno de los rostros más visibles del escándalo de Democracia Viva.
Después de un largo tránsito por el desierto, la parlamentaria figura hoy como una más de los miles de militantes del unificado partido del FA e, incluso, formó parte de la gira presidencial a Paraguay que realizó el Mandatario hace pocos días. Para algunos, la invitación puede ser leída como una oportunidad para que pueda salir de la segunda línea en la que se sumergió obligadamente tras el escándalo por el caso Convenios. Para otros, sin embargo, su vuelta a la militancia no será miel sobre hojuelas, ya que su mera presencia podría estar reñida con el discurso de “tolerancia cero” que busca establecer la nueva presidenta de la colectividad, Constanza Martínez.
La gira del Presidente Gabriel Boric buscó profundizar la relación bilateral entre Paraguay y Chile. No obstante, en el plano local, la crisis de seguridad interfirió en la agenda del Primer Mandatario. El Presidente Boric decidió no participar en un recibimiento organizado por el mandatario Santiago Peña para el día martes en su llegada. Según cuentan quienes asistieron, duró “hasta tarde”. Así las cosas, el Jefe de Estado chileno se quedó monitoreando la situación de seguridad local con la ministra del Interior, Carolina Tohá.
En una visita corta, de poco más de 24 horas, el Presidente asistió al Banco Central, al Palacio de López y al Congreso Nacional paraguayo. Muchas actividades en las que parlamentarios y autoridades de la Región de Antofagasta participaron a propósito de la agenda que los convoca: el corredor bioceánico.
Durante la mañana del martes, el día en que el Presidente comenzó su gira, la presidenta del Frente Amplio, Constanza Martínez, se refirió al caso Convenios en Radio Sonar y se mostró conforme con las sanciones que Revolución Democrática impuso a los implicados en el caso Democracia Viva.
Advirtió que la directiva que ella preside pretende marcar una línea similar. “Tendremos tolerancia cero ante este tipo de situaciones, sin defensas corporativas y con todo el rigor para que estos casos nunca queden en impunidad”. Un mensaje que de alguna manera echó luces sobre la comitiva que acompañó al Presidente Boric y, en particular, sobre Catalina Pérez.
La diputada se había excluido –o había sido excluida– del espacio más público luego del caso Convenios. Cuando estalló este y Democracia Viva se convirtió en el emblema del escándalo, Pérez fue suspendida de Revolución Democrática porque su pareja en ese momento, Daniel Andrade, era el fundador y representante legal de la fundación, y la parlamentaria se vio vinculada al caso sin responder de forma convincente ante la opinión pública sobre su desconocimiento de los hechos.
Por esta situación, el Partido Republicano presentó una querella que tiene a Pérez como imputada en el caso Convenios. Por esa misma querella también están imputados el jefe de asesores del Presidente Boric, Miguel Crispi, y el exministro de Desarrollo Social, Giorgio Jackson.
La sanción para Pérez fue la suspensión de la militancia de Revolución Democrática durante un año. Ese plazo venció el 3 de julio y, con la formación del Frente Amplio, la militancia de la parlamentaria se reactivó y ahora figura como una más en las filas del partido del Presidente Boric. En la gira se los pudo ver en un intercambio amistoso de saludos protocolares.
Tras el escándalo de Democracia Viva, la diputada se alejó de la agenda nacional y se dedicó al trabajo territorial. Desde su equipo afirman que no pueden confirmar si su electorado sigue fiel a ella, a menos que Pérez se presente para una reelección el próximo año, cosa que aún no está del todo decidida. Desde el círculo cercano de la diputada creen que el avance judicial ha logrado esclarecer las cosas más que enlodar su figura.
Su regreso a la militancia del FA coincide con varios elementos que para nada son casuales. La apertura de la diputada hacia la prensa, una relación con el Gobierno que, a pesar de haber estado alejada, nunca se vio quebrada, y la gira presidencial a Paraguay.
Fuentes al interior del partido confirman que efectivamente Pérez es militante, pero aseguran que están alertas. Las mismas fuentes recuerdan que el Tribunal Supremo de RD tomó la decisión de suspender la militancia de la parlamentaria por Antofagasta con los antecedentes disponibles.
Sobre eso, las fuentes que declararon a El Mostrador sostienen que existe una investigación en curso y, en caso de surgir nuevos antecedentes, los órganos competentes pueden revisar el caso. Si es que el partido Frente Amplio quisiera abrir un proceso en contra de la diputada, se necesitarían nuevos antecedentes, explican conocedores de la situación.
Este discurso de “tolerancia cero” y “hay una investigación en curso” se da justo cuando el Juzgado de Garantía de Antofagasta lleva adelante la reformalización de Carlos Contreras, Daniel Andrade y Paz Fuica, los principales involucrados en el caso Democracia Viva, todos expulsados en su momento como militantes de RD.
Además, coincide con que el Servicio Electoral (Servel) aplicó sanciones a “Aprueba por Chile” y a “Democracia Viva” por graves conductas en la campaña del plebiscito de 2022. Según cuenta La Tercera, cada entidad fue multada por no haberse inscrito como comando ante el Servel, pues las entidades coordinaron “actividades conjuntas como distribución de publicidad, organización de eventos, recolección de fondos y planificación de gastos de campaña”.
En la resolución del Servel también se lee: “Las conversaciones entre Felipe Heusser –quien fue militante de RD y pieza clave en la campaña del Apruebo– y Daniel Andrade muestran que las decisiones sobre el uso y destino de los fondos eran tomadas por Heusser, quien coordinaba y supervisaba las actividades financieras y de campaña. Esto se refleja en las instrucciones precisas y detalladas de Heusser a Andrade sobre la gestión de cuentas y pagos a proveedores, indicando una clara centralización del control financiero”, complementó la resolución del Servicio Electoral.
Catalina Pérez fue una de las invitadas a la gira presidencial a Paraguay. Hoy vuelve a ser militante y ahora del FA. Su presidenta, Constanza Martínez, ya advirtió que tendrán “tolerancia cero” con los casos de corrupción y la militancia de Pérez se mantendrá a menos que existan nuevos antecedentes.
Inscríbete en el Newsletter +Política de El Mostrador, súmate a nuestra comunidad para informado/a con noticias precisas, seguimiento detallado de políticas públicas y entrevistas con personajes que influyen.
