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Crédito: Agencia Uno
El senador y ahora expresidente de la UDI entregó respaldo a su padre, condenado por abusos sexuales contra menores de edad y que tuvo trato privilegiado durante su prisión preventiva. “Jamás permitiría que una situación familiar, por dolorosa que sea, afectara aún más a las menores de edad”, dijo.
La polémica que causaron sus declaraciones, apoyando a su padre, el condenado Eduardo Macaya, le costó la salida al presidente de la UDI, el senador Javier Macaya, quien no pudo soportar la presión de todo el espectro político y optó por renunciar a su cargo como líder de la testera gremialista.
“Frente a la sentencia que afecta a un integrante de mi familia, reitero mi profundo respeto al Estado de Derecho, a las decisiones de la Justicia y manifiesto mi férreo compromiso con los derechos de las menores involucradas en dicha situación”, dijo en un comunicado publicado este martes.
En ese sentido, agregó que “el país enfrenta desafíos enormes; problemas muy severos están afectando a millones de chilenos, en un camino que urge rectificar. La UDI cumple un rol importante en la conducción de esos desafíos, a lo que debe abocarse plenamente”.
“Por tanto y en aras de mi compromiso político, he tomado la decisión de renunciar a la presidencia de la Unión Demócrata Independiente. Jamás permitiría que una situación familiar, por dolorosa que sea, afectara aún más a las menores de edad involucradas y, asimismo, al desempeño de mi partido y la trascendencia de su responsabilidad frente a Chile”, cerró.
Según antecedentes del caso, Macaya se encontró entre la espada y la pared luego de la entrevista de este domingo, en Mesa Central en Canal 13. De hecho, este martes reconoció que fueron “un “error” por haber planteado que un video utilizado en el juicio fue grabado en el entorno familiar, pero sin el consentimiento de su padre y con imágenes editadas.
“Es una persona que es grabada en un entorno familiar (…) grabada sin su consentimiento (…) con un video que es bastante editado”, señaló en su momento.
Pese a lo anterior, confió en que sus dichos no iban a escalar más, pero el sumario interno anunciado por Gendarmería luego de un reportaje de El Mostrador, en donde se mencionaba los privilegios que tuvo Eduardo Macaya durante su prisión preventiva, aumentaron las críticas hacia Macaya.
Entre los datos revelados, se supo que Macaya permaneció en la enfermería del recinto, y además habría recibido visitas en horarios irregulares.
