PAÍS
Imagen del fiscal encontrada en el celular del imputado
La Fiscalía y la PDI desbarataron grupo que compró 10 mil litros de acetona, para fabricar cocaína. En el teléfono de uno de ellos había fotos del fiscal regional Mario Carrera. Es la segunda vez que ocurre algo así en el año.
En prisión preventiva quedaron hoy tres sujetos que fueron detenidos por la Brigada Antinarcóticos y contra el Crimen Organizado (Brianco) de Arica, acusados de efectuar millonarias compras de precursores químicos que son utilizados en el refinamiento de la pasta base de cocaína, con el fin de producir clorhidrato de cocaína.
Se trata de Romy Humire Soto, Julio César Delgado Verbo y Rodrigo Javier Opazo Huck, quien en las elecciones de 2021 fue candidato a concejal por Camarones (comuna ubicada a 200 kilómetros de Arica), por el Partido Regionalista Independiente (PRI), elección en la cual solo obtuvo siete votos, de acuerdo con los datos registrados en el Servel.
Ahora, sin embargo, junto a los otros dos sujetos, estaba dedicado a la compra de acetona a escala industrial (10 mil litros), de acuerdo con los registros telefónicos que fueron encontrados en el celular de Humire, de nacionalidad peruana.
En total, el trabajo entre la Brianco y la Unidad de Análisis Criminal y Focos Investigativos de la Fiscalía de Arica permitió la incautación de 46 tambores contenedores que contenía 10 mil litros de acetona de procedencia irregular. Lo anterior, indicó el Ministerio Público, corresponde a la mayor incautación en Chile de acetona, destinada a la elaboración de drogas.
“Se investigó a una organización criminal dedicada a la adquisición de importantes cantidades de precursores químicos en la ciudad de Santiago, las que posteriormente eran trasladadas vía terrestre hasta la ciudad de Arica, donde era acopiada y posteriormente desviada hacia Bolivia para la fabricación de cocaína”, explicó el subprefecto José Vergara, subjefe de la Brianco Arica, en relación al trabajo investigativo realizado además con la Brigada Investigadora de Sustancias Químicas (Brisuq), y la Brigada Investigadora de Lavado de Activos (Brilac) Arica.
En tanto, el fiscal regional Mario Carrera señaló que “este exitoso procedimiento se suma a otra importante incautación de esta sustancia acetona, que se registró hace poco más de un mes, con otros tres detenidos, lo que da cuenta del fuerte trabajo de persecución penal realizado contra el desvío de precursores químicos e insumos destinados para elaborar droga ya sea en nuestro país o en otros países”.
La indagatoria estableció que los imputados utilizaban una empresa de fachada en Arica, de compra y venta de repuestos automotrices, para adquirir grandes cantidades de acetona en Santiago, la que luego era trasladada hasta Arica. En este caso en particular los imputados pagaron un poco más de 21 millones de pesos, lo que les había permitido la fabricación de aproximadamente 650 kilos de clorhidrato de cocaína.
El celular de Humire resultó ser una mina de oro para los investigadores, que comenzaron a trabajar el caso en septiembre pasado, a partir de la detección de “burreros” que llevaban dosis de drogas adosadas en el cuerpo hasta Australia.
Gracias a esa pista inicial se llegó a los tres imputados, quienes se cree eran quienes adquirían la acetona entregando información falseada a los proveedores (como es una sustancia controlada, dado su uso como precursor químico, su compra exige una serie de requisitos) para entregarla a una empresa de Cochabamba (Bolivia), a su vez manejada por una organización productora de cocaína.
En el celular de Humire se encontró una serie de conversaciones en las cuales le pregunta a una mujer sobre cómo se fabrica la ketamina, imágenes de tambores de acetona y sacos de ceniza de soda pesada, “ladrillos” que podrían corresponden a los clásicos envoltorios de drogas, regateos por la compra de ketamina, comprobantes de transacciones monetarias por varios millones de pesos y diálogos con Opazo Huck (a quien identifica en su equipo como “Rodrigo Contador”) sobre la compra de la acetona.
Además de ello, el celular del imputado mostró que este seguía habitualmente noticias relativas a decomisas de drogas. De hecho, tenía un pantallazo sobre una incautación de 33 kilos en Estación Central y Maipú y otro sobre un decomiso de 800 kilos de droga efectuado en Arica, donde no solo está la foto de un diario que informa en su portada acerca del hecho, sino que también hay una captura de pantalla donde aparece el fiscal regional de Arica y Parinacota, Mario Carrera, hablando al respecto.
Esta es la segunda vez en lo que va del año que se detectan imágenes de dicho persecutor al interior de celulares de imputados. Previamente sucedió lo mismo, como informó El Mostrador, con el teléfono de uno de los imputados de la banda transnacional “Los Gallegos” William Isaac Celas Garrido, de 21 años, más conocido como “El Javi”, quien está imputado por homicidio. En su teléfono la PDI encontró un video del fiscal Carrera, en el cual este daba cuenta del primer operativo masivo efectuado en contra de dicha agrupación criminal, en junio de 2022.
Por esta y otras amenazas, Carrera cuenta con protección policial permanente, lo mismo que el fiscal a cargo de la investigación de “Los Gallegos”, quien fue amenazado con un arma, motivo por el cual fue relocalizado y asiste al juicio de forma telemática.
En el teléfono del narcotraficante había además numerosas imágenes de grandes cantidades de paquetes de cocaína (marcados con la figura de un delfín), fotos de armas de fuego e imágenes de él mismo posando, muy feliz, frente a millones de pesos en dinero chileno en efectivo, en billetes de 10 y 20 mil pesos.
Los tres sujetos fueron formalizados hoy por desvío de precursores químicos y lavado de activos, y quedaron en prisión preventiva.
[*] Este artículo describe o contiene elementos de un proceso judicial en curso. Existe la posibilidad de que los cargos o hechos sean desestimados al finalizar la investigación o el proceso, por lo cual NO se debe considerar al o los imputados mencionados como culpables o los hechos como fehacientes, sino solo plausibles, hasta que la Justicia respectiva dicte sentencia.
