Según detalló la PDI en un comunicado, un funcionario de la institución recibió información sobre un posible asalto a una empresa de valores en la zona, durante las labores rutinarias de trabajo de campo.
La Policía de Investigaciones (PDI) reconoció que tenía antecedentes previos sobre el cinematográfico robo a la sucursal de la empresa Brinks en Rancagua, ocurrido el 16 de agosto.
Según detalló la PDI en un comunicado, un funcionario de la institución recibió información sobre un posible asalto a una empresa de valores en la zona, durante las labores rutinarias de trabajo de campo.
De acuerdo al comunicado, la información fue recepcionada por un integrante de la dotación de la Región Policial del Libertador Bernardo O’Higgins, quien procedió a verificar la veracidad de los antecedentes para determinar las acciones pertinentes a seguir.
“En este contexto, esta información fue canalizada al entonces Prefecto Provincial de Cachapoal, cuya ponderación, análisis y caracterización fue desatendida por éste, lo que dilató su canalización al Ministerio Público”, añade el comunicado.
Por lo mismo, “y consecuentes con los altos estándares que se exigen a cada funcionario de la PDI, el Director General Eduardo Cerna Lozano llamó a retiro inmediato al Prefecto Provincial de Cachapoal por su eventual responsabilidad en la dilación de la entrega de los antecedentes al Ministerio Público, instruyéndose además la apertura de un sumario administrativo, para esclarecer fehacientemente las causas y circunstancias de estos hechos”.
“Esta lamentable situación no merma en absoluto nuestro compromiso, dedicación y abnegación en la investigación profesional de los delitos, ofreciendo así a la ciudadanía la tranquilidad y seguridad que legítimamente nos exige”, añaden en el comunicado.
Además, la PDI informó que puso a disposición del Ministerio Público todos los antecedentes recabados en beneficio de la investigación en curso.