PAÍS
Una serie de conversaciones, registrada en un grupo denominado “Amigos”, entre el empresario, el abogado y el político, dan cuenta de variadas reuniones, encuentros y cafés que figuran en los chat confiscados por la fiscalía.
La formalización de Luis Hermosilla dejó entrever una íntima relación del abogado con Álvaro Jalaff y Andrés Chadwick, a propósito de una comida que estaba organizando el empresario para agasajar al expresidente Piñera a comienzos del año 2016, reunión que fue descrita en un reportaje aparecido en este medio la semana pasada.
El encuentro, sin embargo, representaba apenas la punta del iceberg. Según un nuevo reportaje de Ciper, la cercanía entre los involucrados era tan estrecha que incluso tenían un grupo de WhatsApp denominado “Amigos”.
A partir de las conversaciones registradas queda en evidencia no sólo el vínculo cercano entre el empresario, el abogado y el político, sino una serie de intercambios que dan cuenta de reuniones, citas, comidas y cafés con autoridades del más alto nivel.
Es el propio Luis Hermosilla, quien le recomienda a Álvaro Jalaff cultivar “como un tesoro” su nueva amistad con Andrés Chadwick, en un chat registrado en julio de 2018, pues este “weón va a ser presidente”, le dice.
En el teléfono de Hermosilla, confiscado por la fiscalía, se registra una serie de conversaciones donde comentan frecuentemente cuanto se extrañan y quieren, palabras reservadas solo para personas de extrema confianza. “Tú y ACH (Andrés Chadwick) son mis único hermanos”, le comenta Hermosilla a Álvaro Jalaff en otro chat.
Pero no todo era afecto y amistad, en otra conversación del año 2018 el abogado se encarga de gestionar reuniones entre los hermanos Jalaff y Andrés Chadwick. Si bien existen algunas citas que no se materializan, habría otras donde sí habrían logrado reunirse.
Álvaro Jalaff, según las conversaciones registradas, se reunió al menos una vez con Andrés Chadwick en las oficinas de Apoquindo 3000, lugar donde funcionaba la fundación del expresidente Avanza Chile, y donde el exministro era presidente del organismo.
En otra oportunidad, en julio de 2018, Álvaro Jalaff menciona haber conversado con Chadwick sobre una reunión confirmada con el “número uno” –no se especifica si es Piñera u otra autoridad– y un ministro de economía, para “ver cuatro proyectos”.
La amistad se empieza a estrechar tanto, que es el mismo empresario quien invita a Chadwick a su fiesta de matrimonio en Cachagua, en la playa, frente a la isla de Los Pingüinos, según consignó El Mostrador en marzo de 2019.
La mesa de Chadwick, según consigna el propio Álvaro Jalaff en el chat, estuvo compuesta por “Oscar Leria, Pao luksic, Víctor y la Pati, Andrea Abadie, Rafa Villanueva uno muy buena onda abogado”, explica. Luego remata la frase con “una mesa coolisima”.
En el año 2019, nuevamente el nombre de Sebastián Piñera aparece en las conversaciones, esta vez a partir de una nueva invitación realizada por Álvaro Jalaff , a través de Hermosilla, al entonces presidente de la República.
“ACH (Andrés Chadwick) está feliz con tu invitación pero SP (Sebastián Piñera) nos acaba de convidar a comer a su casa para el mismo lunes”, se excusó el mismo abogado tras la fallida invitación.
Luego Hermosilla propone realizar una segunda reunión, el 17 de diciembre de ese mismo año. Álvaro Jalaff insiste en que asista Piñera y el abogado le responde que “ACH lo único que quiere es que vayamos a tu casa” y que “ACH está feliz y muy agradecido contigo”, para luego bromear con llevar unas “venezolanas”. Esa comida sí se concretó, según quedó registro en los chat, donde también habrían participado Darío Calderón, Antonio Jalaff, Maurice Khamis y Francisco Feres.
Al otro día, contentos por la reunión, Hermosilla le escribe a Álvaro Jalaff a las 14:17:
Luis Hermosilla: Alvarito. Te pasaste ayer!! Gran encuentro. Mi amigo feliz feliz. Y yo.
Álvaro Jalaff: En serio ??
Álvaro Jalaff: Está feliz.
Luis Hermosilla: Te quiero más que antes.
Álvaro Jalaff: Yo a ti te amo. Y a él lo quiero mucho.
A medida que avanza el tiempo, el estallido social comienza a aparecer en las conversaciones. El mismo 18 de octubre, Álvaro Jalaff le escribe a Hermosilla, que venía viajando desde La Araucanía, que lo extrañaba y que estaba la “cagada” en Santiago. “Está la zorra. En patio todos acuartelados”, le dice Jalaff, insinuando en qué podían “apoyar”.
Los chat de Álvaro Jalaff dan cuenta de la preocupación del dueño de Grupo Patio por lo que estaba pasando en el país, particularmente en los centros comerciales de la compañía y la creciente ola de saqueos.
“Qué onda nuestro amigo /Debe poner mano dura de verdad /Trump way /No se ven los milicos”, dice Álvaro Jallaf a propósito de Andrés Chadwick, entonces ministro del Interior y encargado de la seguridad pública del país.
El empresario asegura que se ha reunido con varios CEO de distintas empresas, como Falabella, Cencosud, Walmart y que incluso conversó el actual alcalde de Lo Barnechea, Cristóbal Lira, entonces asesor en materias de seguridad en el gobierno.
Álvaro Jalaff está tan desesperado que el 20 de octubre le escribe a Hermosilla que estaba armando su propio ejército. “500 efectivos”, dice. “necesitamos mano dura”, agrega”. “Que respeten estos rotos de mierda”, concluye.
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