Comisiones investigadoras, denuncias ante la Superintendencia de Educación Superior, cuestionamientos del mundo político que incluyen “fuego amigo” son parte de lo que deja el escándalo por el sueldo de Marcela Cubillos en la universidad donde Andrés Chadwick es presidente del consejo directivo.
Diferentes reacciones generó la última edición de El Semanal de El Mostrador, en donde se reveló que la exministra de Educación y actual candidata a alcaldesa por Las Condes, Marcela Cubillos Segal, tuvo un sueldo de $17 millones de pesos brutos al mes. Esta remuneración se pagó incluso durante todos los periodos en que Cubillos estuvo viviendo en Madrid, junto a su pareja, Andrés Allamand, líder de la Secretaría General Iberoamericana (SEGIB).
La primera fue la defensa de la propia Cubillos: durante la tarde del lunes publicó en la red social X (anteriormente Twitter), señalando: “Sí, dejé un muy buen trabajo para asumir la candidatura en Las Condes”.
Sí, dejé un muy buen trabajo para asumir la candidatura en Las Condes.
El año 2020 empecé a trabajar en la USS hasta agosto de este año. En docencia e investigación.
Mi marido ejerce un cargo en España, sí. Yo trabajo en Chile.
Estuve siempre entre los profesores mejor…
— Marcela Cubillos Sigall (@mcubillossigall) September 23, 2024
Además durante horas de la mañana, la candidata a la Municipalidad de Las Condes devolvió las críticas que le granjearon las revelaciones. “No sé qué pretende la izquierda si la próxima vez que trabaje en el mundo privado le tenga que pedir a ellos que me fijen el sueldo”, agregó sobre el sueldo que cobró por sus clases, las que realizó -según dijo- desde 2020 hasta agosto de 2024. Cabe destacar que, desde la tarde del martes, ha republicado en su cuenta de X casi una veintena de mensajes de apoyo. Sin embargo, ninguna defensa logró aplacar la ola de críticas en su contra y en contra de la Universidad San Sebastián.
Los diputados socialistas Daniella Cicardini y Daniel Manouchehri oficiaron al Ministerio de Educación, la Superintendencia de Educación Superior y la Contraloría General de la República, con el fin de esclarecer el “presunto financiamiento ilegal de la política”. “(La USS) es la cueva donde se refugia la ‘red de Hermosilla’ y por eso debe ser investigada a fondo”, señaló Cicardini, apuntando a la serie de nombres involucrados en el caso homónimo y que, al igual que Cubillos, figuraban ligadas en diversos roles -desde docentes al presidente de la junta directiva- a la casa de estudios.
“Chadwick, Vivanco, Guerra, Matus, Felipe Ward, tienen en común estar involucrados en el Caso Hermosilla y trabajar en esta universidad. Lo que hemos sabido de Cubillos es extremadamente sospechoso, 17 millones de pesos no es el salario normal de un docente universitario”, añadió el diputado Manouchehri, quien además advirtió: “acá podría haber lucro encubierto, pero lo que es más grave, podría haber financiamiento irregular de la política”.
En paralelo, diputados socialistas anunciaron una comisión investigadora que esclarezca la situación en el ente educativo. “Ningún investigador, ningún docente en nuestro país percibe una remuneración de estas características, ni si quiera aquellos que forman parte de grandes universidades como Oxford o Massachusetts”, apuntó el diputado Juan Santana, quien realizó el anuncio de la comisión junto a compañeros de bancada: Nelson Venegas, Jaime Naranjo y Leonardo Soto.
“Así como todos los caminos de Hermosilla conducen a Chadwick, paradójicamente todos los caminos están conduciendo a la Universidad San Sebastián”, alertó el diputado Venegas.
“Queda claramente expresado que la Universidad San Sebastián se ha transformado en una asociación ilícita que ocupa recursos del Estado para el financiamiento político y lo más grave de todo esto y emplazamos en este momento a la Universidad San Sebastián, a su rector, al señor Chadwick, a que le den explicaciones al país”, agregó el diputado Soto.
La comisión también fue respaldada por la diputada Camila Musante, quien a la vez ingresó una denuncia ante la Superintendencia de Educación. La diputada jefa de bancada del comité IND-PPD se cuestionó el rol de la USS en la política chilena. “¿Qué es lo que ocurre realmente con la Universidad San Sebastián? Ya varios personeros políticos se han visto involucrados con altos sueldos. Conocíamos los $17 millones de Marcela Cubillos, pero no es la única: Chadwick, Palma, y así la lista es bastante larga”.
Otra persona que tuvo palabras sobre la situación en la USS, pero esta vez desde la propia oposición, fue la diputada Ximena Ossandón (RN). No obstante mostró reparos respecto a si correspondían cuestionamientos de este tipo en una universidad privada, sí destaco que la USS servía como segunda línea para varios nombres del mundo político.
“No es que sea un delito, pero el fiscal (Manuel) Guerra, la señora del fiscal nacional (María José Taladriz)… Cualquier persona que quedaba ahí como dando vueltas terminaba en la Universidad San Sebastián. Yo no estoy diciendo que (Cubillos) no tenga las capacidades para ser docente, pero efectivamente, la relación Chadwick-USS es potente y eso no se puede negar”.
Quien mostró una linea más dura al respecto fue el presidente del Colegio de Profesoras y Profesores, Mario Aguilar, quien apuntó a las labores de Cubilllos como docente, en particular a su catálogo de funciones. “Pagar 17 millones de pesos por una jornada parcial, en donde no se hace la actividad de docencia normal de un académico, donde no hay investigación, donde no hay publicaciones que lo respalden, es sencillamente un escándalo“, explicó Aguilar en el canal de YouTube del Colegio de Profesores, quien también advierte de un posible blanqueo de su currículum. “Se van a dar mil explicaciones, se va a inventar un cierto curriculum que no tiene la señora Cubillos y que no tienen otros políticos que se hacen pasar por académicos, que no lo son”.