PAÍS
La expresidenta del Tribunal Constitucional calificó como “histórico” el proceso que destituyó a los exministros Muñoz y Vivanco, señalando que podría haber afectado el debido proceso y el derecho a la defensa, lo que abre la posibilidad de un recurso ante instancias internacionales.
La expresidenta del Tribunal Constitucional, Marisol Peña, se refirió a la reciente destitución de los exministros de la Corte Suprema, Sergio Muñoz y Ángela Vivanco, tras la aprobación de las acusaciones constitucionales en su contra por parte del Senado. Ambos jueces quedaron inhabilitados para ejercer cargos públicos por un período de cinco años.
Peña calificó el proceso como “histórico” debido a la inusual circunstancia de que se haya tramitado una acusación constitucional contra dos autoridades distintas por hechos distintos.
“Es histórico porque nunca habíamos visto, y ayer la discusión fue muy álgida en torno a este punto, que se dedujera una acusación constitucional en contra de dos autoridades distintas, por hechos distintos, lo cual forzó naturalmente a tramitar la acusación en términos que me atreví a calificar, desde un comienzo, como anómalos”, señaló en conversación con Radio Biobío.
Sobre el posible éxito de un eventual recurso de Muñoz ante la Corte Interamericana de Derechos Humanos, Peña expresó que el procedimiento pudo haber vulnerado el derecho a la defensa.
“Al haber admitido y haber tramitado -estoy hablando en la Cámara de Diputados- una Acusación Constitucional que se refería a dos personas distintas, por hechos distintos, en circunstancias que una Acusación Constitucional lo que persigue son responsabilidades constitucionales y personales, eso creo que se podría argumentar que complica el derecho a la defensa”, agregó.
Junto con esto la abogada destacó que los principios del debido proceso se aplican a todo tipo de procedimientos, incluyendo los juicios políticos, como lo son las acusaciones constitucionales. “La Corte Interamericana de Derechos Humanos ha sostenido que, en estos casos, debe protegerse la independencia judicial y garantizar el derecho a la defensa”, afirmó.
En esa línea y en relación al fondo de la acusación contra Sergio Muñoz, quien fue señalado por notable abandono de deberes, Peña coincidió con las posturas de los senadores Francisco Chahuán y Luciano Cruz-Coke. “Creo que, en el primer capítulo acusatorio, se pudo haber configurado el cargo; no así en el segundo”, concluyó.
