Testigos del ingreso de Barriga al módulo 2 del recinto penitenciario relatan cómo la otrora alcaldesa fue bien recibida, tanto por la imputada en el caso Hermosilla como por el resto de reclusas.
Durante la jornada de ayer hizo ingreso a la Cárcel de San Miguel la exalcaldesa de Maipú, Cathy Barriga, luego de que el 9° Juzgado de Garantía de Santiago acogiera la solicitud de prisión preventiva en su contra formulada por el Consejo de Defensa del Estado.
Barriga, quien dirigió la comuna entre 2016 y 2021 y posteriormente fue detenida en el marco de una serie de investigaciones que apuntan a diversos delitos de corrupción en su administración (en específico fraude al fisco y falsificación de instrumento público), cumplirá la medida cautelar por 90 días.
En el recinto fue recibida por Leonarda Villalobos ―imputada por soborno, delitos tributarios y lavado de activos en el caso Hermosilla―, quien también se encuentra en la sección de connotación social o pública del módulo 2 desde fines de agosto pasado.
Fuentes indicaron que Villalobos tomó la labor de informarle de cómo funcionaba la rutina del sector: con desayunos a las 8:30, almuerzo desde las 12:00 y una última comida a las 16:00, según informa Ex-Ante. Asimismo los presentes relataron que la otrora alcaldesa fue bien recibida por las demás internas durante la jornada, llegando a su segundo día sin inconvenientes.
Desde Gendarmería informaron que, si bien ambas compartirán el 2° piso de la torre 2 del centro penitenciario, estarán en celdas diferentes. El módulo consta de seis dormitorios pensados para albergar a 32 internas cada uno, las cuales sólo están aisladas durante la noche. Cathy Barriga comparte la unidad en la que terminó con otras 16 mujeres.
Durante el día las reclusas pueden acceder (según corresponda) al patio común del módulo. En el primer piso hay una planta libre, espacio para talleres y sala de actividades.
Cabe recordar que la defensora de Villalobos, Alejandra Borda, solicitó el traslado de la imputada al Centro Penitenciario Femenino de San Joaquín durante el mes de septiembre. Esto luego de que denunciara que Villalobos encontró en su celda una nota advirtiéndole que terminaría “masacrada”. Petición que fue rechazada por Gendarmería.
La situación reactivó la conversación sobre el destino de las mujeres en prisión por causas no violentas. Esto debido que, a diferencia de Luis Hermosilla -quien se encuentra en Capitán Yáber, recinto dedicado para reos por delitos de naturaleza no violenta-, Villalobos y ahora Barriga se encuentran en un centro penal que no da esa garantía.