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Foto: AgenciaUNO
El análisis de 172 cámaras de seguridad por parte de la PDI y el testimonio de la ministra del Interior ante el fiscal Armendáriz fueron clave para el avance en el denominado caso Monsalve. El exsubsecretario será formalizado mañana.
A un mes de la denuncia de una funcionaria de la cartera contra el entonces subsecretario del Interior, Manuel Monsalve, este jueves 14 de noviembre se concretó la detención del ahora exfuncionario del ministerio liderado por Carolina Tohá. La captura, que se produjo después de intensas diligencias investigativas, incluyó la exhaustiva revisión de cámaras de seguridad y otros elementos clave que permitieron reconstruir el trayecto de los implicados la noche de los hechos ocurridos el 22 de septiembre en Santiago Centro.
Según fuentes cercanas a la investigación consignadas por el diario La Tercera, el equipo de la Fiscalía Metropolitana Centro Norte y la Policía de Investigaciones (PDI) realizaron un minucioso análisis de 172 cámaras de seguridad, tanto públicas como privadas, localizadas en la comuna capital. Esta revisión fue esencial para reconstruir con precisión los movimientos de Monsalve y la denunciante desde que abandonaron el restaurante Ají Seco Místico hasta su llegada al Hotel Panamericano, lugar de los hechos denunciados.
De acuerdo al citado medio, las imágenes obtenidas mostraron que Monsalve y la denunciante salieron del restaurante minutos antes de las 23:00 horas del 22 de septiembre. En los videos, se observa que la denunciante, a diferencia de Monsalve, caminaba con movimientos erráticos, lo que según los investigadores podría indicar un estado de embriaguez. En una de las imágenes a las que se hace referencia, se puede ver cómo Monsalve toma a la denunciante por sorpresa, la besa, pese a que ella intenta alejarse y se resiste. Esto, de acuerdo con un informe de más de 150 páginas elaborado por la PDI.
Otra pieza clave en la investigación fue la reconstrucción del trayecto en taxi que ambos tomaron en dirección al hotel. En los videos se observa que la funcionaria vomita, y en varios momentos se muestra luchando por alejarse del vehículo. De acuerdo con el mencionado informe, Monsalve viajaba en el asiento trasero, vestido de negro, con lentes y un jockey, mientras que la denunciante permanecía en el asiento delantero.
A su llegada al hotel, también se lograron levantar testimonios del personal del recinto, quienes confirmaron que la denunciante estaba visiblemente afectada por el alcohol, en un estado mucho peor que el de Monsalve. De hecho, según los relatos, el exsubsecretario solicitó al personal del hotel que cambiara la tarjeta de su habitación, ya que la inicial no funcionaba.
El denominado caso Monsalve, quien fue una figura clave del Ministerio del Interior, ha impactado al Gobierno y a la opinión pública. A raíz de esto, la oposición insiste en la salida de la ministra Tohá.
Se espera que durante la formalización de cargos contra Monsalve (a realizarse mañana viernes a las 9:00) se le imputen los delitos de abuso sexual, violación consumada y violación tentada.
Un día después de que el Presidente Gabriel Boric declaró voluntariamente ante el fiscal del caso, Xavier Armendáriz, el miércoles 30 de octubre, la ministra del Interior, Carolina Tohá, también brindó una declaración “voluntaria” como testigo, respecto al conocimiento que tuvo el Gobierno sobre las denuncias de violación y mal uso de la Ley de Inteligencia en contra del entonces subsecretario Monsalve.
Según consignó La Tercera, la importancia de la declaración de Tohá ante la Fiscalía fue tal que se utilizó para justificar la solicitud de detención de Monsalve. Uno de los aspectos más reveladores del testimonio de la ministra fue la naturaleza de sus preguntas a Monsalve en un llamado realizado el martes 15 de octubre (la renuncia del subsecretario se concretó el 17).
“Le pregunté si acaso había habido sexo en la noche”, recordó Tohá durante su declaración, a lo que Monsalve habría respondido que no estaba seguro, pero que creía que sí.
En una segunda consulta, Tohá indagó si había ocurrido algún incidente sexual en la mañana del 23 de septiembre, haciendo referencia al segundo cargo por el que Monsalve será formalizado. “Dijo que no”, agregó Tohá, según lo relatado ante el fiscal Armendáriz.
Las dos principales interacciones entre la ministra Tohá y Monsalve ocurrieron en momentos clave de la crisis. La primera se dio la noche del 15 de octubre, cuando el director de la Policía de Investigaciones (PDI), Eduardo Cerna, alertó a Tohá sobre la acusación. Según el Gobierno, la ministra hizo una llamada telefónica a Monsalve a solicitud de Cerna, con el objetivo de que el subsecretario se presentara en el Hotel Panamericano, donde se realizarían las primeras diligencias. Interior aclaró que la ministra no estaba al tanto de los detalles de las diligencias, como la incautación del teléfono móvil de Monsalve o la toma de muestras de ADN.
La segunda conversación tuvo lugar el 17 de octubre, antes de que Monsalve anunciara su renuncia al cargo en La Moneda. Según Tohá, no hubo un intercambio con Monsalve hasta esa mañana, pese a que el presidente Boric le había instruido previamente que se reuniera con él.
En su declaración ante el fiscal, Tohá también reflexionó sobre cómo reaccionó el Gobierno a la denuncia. Indicó que, “en ningún momento le pregunté -lo haría hoy- por qué no me avisó de toda esta situación antes”.
Este martes, Monsalve enfrentará la justicia tras su salida del gobierno, y la situación sigue evolucionando a medida que nuevas piezas de evidencia salen a la luz. El testimonio de Carolina Tohá ante la Fiscalía sigue siendo una pieza clave para entender cómo se manejó la crisis interna del gobierno y cómo se desarrollaron los hechos en las horas más críticas para La Moneda.
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