PAÍS
Para Axel Callís, director de Tú Influyes, el problema en la derecha es la dispersión de votos entre los posibles candidatos presidenciales, por lo que recomienda realizar “la mayor cantidad de primarias” para tener candidato único, para no afectar opciones de Matthei.
Ya comenzó la campaña presidencial, sobretodo en la derecha, y el debate actualmente es si tienen o no que realizar primarias presidenciales. Es cierto que la alcaldesa de Providencia, Evelyn Matthei corre con ventaja en la derecha para ser candidata, pero hay otros nombres que han surgido en los últimos días.
Desde José Antonio Kast (Republicano) y Rodolfo Carter (Independiente) hasta Ximena Rincón (Demócratas) y Rojo Edwards son algunos de los nombres que han surgido. El problema es que algunos quieren primarias y otros quieren ir en la papeleta directamente, lo que ocasionará dispersión de votos.
De acuerdo a la última encuesta Data Influye, de Tú Influyes, un 26% de los encuestados cree que Matthei debería ir primero a primera vuelta presidencial, mientras que el 26% cree que debería ir a primarias. Lo curioso, es que en estas primarias, los mismos encuestados creen que hay algunos nombres que no deberían presentarse por este temor a la dispersión o porque no los consideran candidatos competitivos.
Ese es el caso de Rincón y Edwards, a quienes el 56% de las personas pide que “no participen el próximo año” en elecciones presidenciales.
Para el director de Tú Influyes, Axel Callís, “el gran enemigo de Matthei es la dispersión de la cantidad de candidatos de derecha y centro derecha que hay. Porque no obstante que podría ganar Evelyn Matei una primera vuelta, dentro del sector podría quedar muy lejos del 50%”.
“Ya aprendimos con el balotaje a gobernador y los distintos balotajes que hemos tenido, que las elecciones en la segunda vuelta las ganan los que quedan más cerca del 50%. Ese es el principal adversario que tiene Matthei, que es la dispersión de la derecha en una primera vuelta donde ella quede demasiado alejada de ese 50% que tiene que construir”, agregó en conversación con El Mostrador. Callís puso como ejemplo lo ocurrido el año 2009, cuando Sebastián Piñera compitió contra Jorge Arrate, Marco Enríquez-Ominami y Eduardo Frei Ruiz-Tagle. Estos tres últimos sacaron 4 millones de votos juntos, y Piñera por sí solo 3 millones. Finalmente, Piñera fue presidente porque quedó más cerca del 50%.
Según Callís, en la izquierda este fenómeno aún no se ve porque “no hay nadie competitivo todavía. No hay ni un candidato”.
Los nombres que surgen, como Vlado Mirosevic (PL), “son candidatos nominales, son candidatos que tienen una escalera para ser senador, no son candidatos para ser presidente. Hay que distinguir entre los candidatos presidenciales y los candidatos que quieren ir a una primaria para ser senador. Entonces, acá hay tres tipos de candidatos: los que tienen opciones presidenciales, los que quieren ser candidatos presidenciales para perfilar el partido o el sector, y los que quieren ir a una primaria para ser senadores”.
Por lo mismo, Callís concluyó que la derecha tiene “que tratar de hacer la mayor cantidad de primarias posible, pero si van con 4 o 5 candidatos lo más probable es que el candidato de la centro izquierda, si van una candidatura única, va a quedar más cerca del 50%, que es el objetivo táctico en una primera vuelta”.
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