Tribunal fijó arraigo nacional y firma para cada uno de los imputados como medidas cautelares. El C-130 viajaba de Punta Arenas a la Antártida y la mayor parte de las víctimas pertenecía a la Fuerza Aérea de Chile.
Dos generales de la Fuerza Aérea de Chile (FACh) fueron formalizados este sábado por el homicidio culposo de 38 pasajeros, en relación a un accidente aéreo ocurrido el 9 de diciembre de 2019 en la región de Magallanes.
El Fiscal Regional de Magallanes, Cristián Crisosto, junto a su equipo investigativo, reformalizó además cargos en contra de dos miembros de la Fuerza Aérea. En la audiencia se afirmó que se incumplieron diversas órdenes técnicas, permitiendo la generación de un riesgo consistente en que el Hércules C130 volara sin estar en condiciones de aeronavegabilidad.
El tribunal decretó arraigo nacional y firma para cada uno de los imputados como medidas cautelares.
Específicamente, el fiscal Crisosto informó que luego de una audiencia de más de 14 horas, la fiscalía formalizó la investigación en contra de los generales Joaquín Urzúa Rentería y Fernando Mondaca Rodríguez de la FACH, además de reformalizar la investigación respecto del excoronel Julio Ojeda Puig y del oficial Marcelo Mella Bertetti.
A todos se les formalizó por el delito culposo de homicidio con resultado múltiple.
“Se formalizó el día de hoy y se solicitaron medidas cautelares personales, en este caso arraigo nacional y firma mensual, y por los antecedentes que se expusieron durante la audiencia el tribunal dio por justificada la existencia del delito y estableció que existían presunciones fundadas de participación de cada uno de ellos y es por eso que se acogieron y el Tribunal ordenó las medidas cautelares de a raigo nacional y firma mensual”, indicó.
Agregó que el Ministerio Público sigue “muy pendiente” y trabajando todos los días por esta causa, “puesto que ha sido una investigación muy difícil, atendido a que, como se recordará, la propia Fuerza Aérea de Chile, en su investigación interna respecto de las causas de la caída del avión, concluyó que no podía establecer la causa”.
“Es por eso que es la misión de la fiscalía poder recabar los antecedentes suficientes para poder establecer la o las causas más probables de este siniestro. En ese contexto hemos podido recabar diversos antecedentes, declaraciones testimoniales, restos de especies y particularmente diversos peritajes, los cuales nos han ido permitiendo ajustar la investigación, de manera de poder hacer estas imputaciones”, agregó.
“Lo importante es que la fiscalía, con todo su equipo, vaa seguir trabajando para poder establecer certezas para los familiares de las víctimas, para establecer cuál es la causa más probable por la cual se siniestró este avión y, por cierto, vamos a seguir investigando con el mismo ahínco para dar respuesta a toda la comunidad magallánica y al país”, concluyó.
El Lockheed C-130 se accidentó el 9 de diciembre de 2019 luego de despegar a las 16:50 horas desde la base aérea de Chabunco (Punta Arenas) con destino a la base Teniente Marsh en la Antártica, aterrizaje que estaba programado a las 19:17 horas, el cual no sucedió.
El último contacto con la aeronave fue a las 18:13 horas sobre el Mar de Drake, por lo que media hora después se hizo oficial la desaparición, activándose el protocolo de búsqueda. Dos días después un buque encontró los primeros restos.
En el operativo de búsqueda solo se hallaron restos del fuselaje, lo que se consideró insuficiente según la investigación interna de la FACH, la que terminó por cerrar la investigación en octubre de 2021. El Hércules en cuestión fue fabricado en 1978.
La mayor parte de los pasajeros, una total de 32, incluidos cuatro oficiales, eran funcionarios de la FACH. Otros eran parte del Ejército de Chile (tres, incluido un general) y civiles (tres).