Encuesta de Ciclos UDP y Feedback Research dio cuenta de que el 72% está indiferente o poco interesado por los asuntos nacionales, donde las formas tradicionales de participación –como manifestaciones o pertenecer a organizaciones sociales o laborales– solo son reportadas por 1 de cada 10 jóvenes.
La Encuesta Jóvenes, Participación y Medios 2024, elaborada por el Centro de Investigación en Comunicación, Literatura y Observación Social de la Universidad Diego Portales (Ciclos UDP), junto a Feedback Research, evidenció que luego del peak experimentado en 2019 y 2020, la participación política entre los jóvenes vuelve a niveles muy bajos, equivalentes a los observados hace más de 10 años.
La medición elaborada anualmente desde el 2009, fue realizada entre octubre y noviembre de 2024 y aplicada a jóvenes de 18 a 29 años que habitan los principales centros urbanos del país, con el fin de proporcionar un panorama detallado sobre su posición ideológica, su uso de redes sociales y actitudes hacia la tecnología.
Este año dio cuenta de una baja en el involucramiento político y una visión pragmática de la actualidad por parte de este segmento, donde las formas tradicionales de participación, como la asistencia a manifestaciones o pertenecer a organizaciones sociales, profesionales o laborales, solo son reportadas por 1 de cada 10 jóvenes.
A esto se suma una baja en el interés por los temas políticos. El sondeo da cuenta de que el 72% de los jóvenes se muestra indiferente o poco interesado por los asuntos nacionales, un aumento respecto al 66% registrado en 2023.
La investigadora de Ciclos UDP y coordinadora ejecutiva de la encuesta, Nicolle Etchegaray, señaló que los datos actuales, así como de ediciones anteriores, muestran que no solo 2019 y la efervescencia de la movilización tuvieron un impacto importante en la juventud.
“La pandemia y sus confinamientos se sumaron para marcar un periodo bastante extenso de incertidumbre, aislamiento y digitalización de la vida social. En cualquier caso, lo que observamos es que el interés y participación aumentaron sustantiva pero momentáneamente durante ese periodo de 2019-20. Antes, la desafección política de los jóvenes era un tema central de discusión pública y académica, no solo en Chile, sino en gran parte de las sociedades occidentales”, indicó.
En ese sentido, la investigadora agregó que el comienzo de este siglo estuvo marcado por un creciente desinterés de los jóvenes por la política, de la mano con una desconfianza en las instituciones democráticas. “Lo que sucede ahora es que volvemos a una situación similar a la que se observaba previo al 2019”.
Respecto a las formas de participación política, la encuesta evidencia que las interacciones más recurrentes entre los jóvenes durante 2024 están relacionadas con el uso de redes sociales. Casi el 30% de ellos dice haber expresado su opinión en redes sociales durante el último año, participando activamente en discusiones o dando apoyo a causas a través de plataformas digitales.
“En lo personal, ¿cuál es el principal problema que te afecta a ti?”, fue una de las nuevas preguntas incorporadas este año y que evidenció una diferencia entre la percepción de las preocupaciones personales con las nacionales. En el ámbito individual, la principal inquietud deja de ser la delincuencia o la inseguridad, pues la prioridad son la economía y el desempleo.
Ante la pregunta sobre la problemática que más afecta a los chilenos, se dio cuenta de preocupaciones similares a las de la población general. Un 41% mencionó a la delincuencia o la inseguridad/temor, mientras que el 28% se inclinó por los temas asociados a la seguridad económica, como la inflación, el costo de la vida y la cesantía.
Sin embargo, al cambiar el foco hacia las preocupaciones individuales preguntando “¿cuál es el principal problema que te afecta a ti?”, la jerarquía cambia. La delincuencia solo es mencionada por el 22%. Mientras que un 42% respondió que se siente afectado por aspectos ligados al trabajo, como la falta de oportunidades laborales, la cesantía y sueldos.
Al respecto, Nicolle Etchegaray indicó que gran parte de las encuestas de opinión pública en el mundo preguntan por el problema que las personas consideran como el más relevante a nivel país y, de alguna manera, se asume que ese problema es también el que las personas creen que más les afecta.
“Entonces, lo primero que nos dicen estas diferencias es que no es así. Una cosa es lo que percibo que la sociedad reclama como lo más importante y otra diferente es lo que impacta en mi propia vida. En ese sentido, lo que los jóvenes nos informan es que la incertidumbre económica y laboral es más preocupante para ellos que las temáticas como la delincuencia, que ven como la principal preocupación de la sociedad en general. Tiene sentido, porque pronto deberán ingresar al mercado laboral, o lo están haciendo. Además, ven incertidumbre en temas como el desarrollo de la inteligencia artificial. Un tercio de los jóvenes dice sentir preocupación por este tema, y una de las razones que más mencionan es que podría reemplazar el trabajo humano”, agregó.
Entre los resultados también se observó cómo ha evolucionado la percepción de los jóvenes frente a los hechos ocurridos durante el estallido social en 2019. Ante la pregunta “¿cuál de las siguientes frases representa mejor tu opinión sobre los eventos que ocurrieron a partir del 18-O?”, el 52% indicó que “fue una protesta legítima, pero se salió de control”, el 25% calificó el estallido como “legítimo y necesario”, y el 14% dijo que “fue una revuelta violenta e injustificada”.
Asimismo, el 48% de los encuestados consideró que “la violencia fue injustificada y dañó la legitimidad del movimiento”, el 30% opinó que “la violencia fue lamentable, pero comprensible en el contexto”, y un 11% dijo que “la violencia estuvo justificada como parte de la lucha social”.
Respecto a los cambios significativos en la sociedad chilena posterior a las movilizaciones del 2019, un 39% considera que “los cambios han sido mínimos”, 29% opina que “no se ha generado ningún cambio” y un 23% que “los cambios han sido moderados”.
Al respecto, la coordinadora ejecutiva de la encuesta, Nicolle Etchegaray, afirmó que “las posiciones de los jóvenes en diversos temas muestran una leve pero sostenida tendencia hacia posiciones más moderadas”. Pero advierte que es importante considerar que “toda la sociedad parece haberse moderado desde 2019 a la fecha”.
“Las encuestas que proliferaron en octubre nos dicen que se mira con una visión más crítica y menos entusiasta lo que sucedió previo a la pandemia. Sin embargo, entre los jóvenes aún son mayoría quienes evalúan críticamente diversos ámbitos de la sociedad. Lo que pasa es que ahora son más los que creen que los cambios deben ser paulatinos”, precisó.