Mientras la postura de La Moneda está en suspenso, hay dos iniciativas en paralelo: la de senadores, que incluye el polémico umbral del 5%, y la del diputado Mulet, que propone federaciones. Parlamentarios advierten riesgo para lista única, pero también recalcan que los proyectos “deben entenderse”.
Con 2024 ya concluido, la política chilena se encuentra centrada en los desafíos que se avecinan para el 2025, con especial atención a las reformas clave que definirá el próximo ciclo legislativo. Mientras La Moneda busca avanzar con su agenda de reformas emblemáticas, como la reforma de pensiones, el Congreso enfrenta una oportunidad crucial para superar las polémicas que marcaron el año pasado y avanzar en acuerdos. Entre las reformas de mayor relevancia, destaca la reforma al sistema político, un tema que ya está generando tensiones en las fuerzas políticas.
Aunque la reforma al sistema político —presentada por senadores del PS a la UDI—no es impulsada directamente por el Gobierno, ha ganado terreno en las discusiones legislativas. La iniciativa busca dar “mayor gobernabilidad” al Congreso y evitar la fragmentación extrema que afecta a la política chilena. Esta reforma ya ha sorteado su primer obstáculo, al ser aprobada en general el pasado 14 de diciembre en la Comisión de Constitución del Senado. Sin embargo, ha encontrado resistencia en ciertos sectores, especialmente en lo relativo al umbral del 5%, una medida que ha generado controversia, principalmente en los partidos más pequeños.
La propuesta del Senado ha sido criticada por sectores que consideran que podría eliminar a fuerzas políticas menores del mapa electoral. Frente a esto, en la Cámara de Diputados hay una segunda propuesta que busca habilitar la creación de federaciones de partidos, permitiendo que las colectividades más pequeñas puedan sobrevivir al umbral y mantenerse en el sistema político. La votación de esta propuesta está programada para el lunes 20 de enero.
El ministro Álvaro Elizalde, a pesar de que la reforma no es de iniciativa del Ejecutivo, ha mostrado interés en contribuir a la discusión legislativa. El diputado Jaime Mulet (FRVS), autor de la propuesta de federaciones, aseguró que el titular de la Segpres está consciente de la “situación coyuntural compleja” que atraviesa la reforma impulsada por el Senado. Consultado por El Mostrador, Mulet destacó que la propuesta de la Cámara de Diputados tiene “elementos comunes” con la del Senado, lo que podría facilitar un entendimiento entre las partes.
“No podemos seguir teniendo parlamentarios que renuncian, usan un partido, renuncian y se van para otro lado, para otro partido, se quedan como independientes, obviamente, privilegiando intereses personales por sobre los intereses ideológicos, colectivos, doctrinarios. Y en eso hay acuerdo, en que el que se va pierde el escaño”, comentó el diputado Mulet.
El parlamentario de la FRVS recalcó que también hay concordancia en que los acuerdos colectivos de los comités primen por sobre los acuerdos o intereses personales o locales. “Ya con esas dos cosas se avanza bastante”, añadió. Según Mulet, “si a eso se le suma la idea del umbral, pero con federación, pudiendo los partidos federarse y actuando como federados, como uno solo, creo que sería un gran avance”.
“Por eso es que los dos proyectos deben entenderse”, declaró.
Desde la Cámara de Diputados, el presidente de la Comisión de Gobierno Interior, Rubén Oyarzo (Ind), también se ha pronunciado sobre la reforma. Oyarzo ha señalado que el proyecto que discute la comisión “concita bastante más apoyo que la propuesta de los senadores” y ha instado al Ejecutivo a comprometerse con la discusión de la reforma. “Esperamos que el Ejecutivo en su rol de colegislador se comprometa a la discusión de este proyecto”, dijo Oyarzo, destacando que el objetivo es mantener a las colectividades más pequeñas dentro del sistema democrático.
“Hemos visto que el gobierno ha tenido una actitud más bien ausente en la discusión de este proyecto, a diferencia de lo que ha hecho en el Senado donde se discute un proyecto que es antidemocrático porque intenta eliminar a las fuerzas políticas más pequeñas”, agregó el diputado Oyarzo.
Finalmente, adelantó que en la Comisión de Gobierno Interior “el próximo lunes tendremos la asistencia de representantes de centros de estudios, algunos de ellos ligados a partidos políticos, donde seguiremos debatiendo y analizando esta iniciativa”.
Por otro lado, desde la oposición, el diputado Francisco Undurraga (Evópoli) criticó la falta de compromiso del Ejecutivo en la discusión. “No veo un esfuerzo real del Gobierno en esta materia. El ministro Elizalde y el presidente Boric no han sido protagonistas”, afirmó Undurraga a Radio Infinita.
El debate sigue en pie y, a medida que se acerque la fecha de la votación en la Comisión de Gobierno Interior, la discusión promete intensificarse. Jaime Mulet, por su parte, se mostró optimista sobre el futuro de la reforma, destacando que la clave está en “buscar entendimiento” y que tanto el gobierno como los parlamentarios deben trabajar juntos para avanzar hacia un sistema político más ordenado y menos fragmentado. Según el diputado oficialista, los acuerdos colectivos deben primar sobre los intereses personales, y es fundamental poner fin a las “malas prácticas” que han deteriorado la confianza de la ciudadanía en el Congreso.
Cabe mencionar que la reforma al sistema político tensiona a los partidos del oficialismo y amenaza el objetivo de una lista única, como ha pedido el Presidente Boric, de cara a las próximas elecciones. De hecho, el diputado Mulet comentó sus aprensiones este jueves, durante la primera reunión del año de los partidos de la coalición gobernante para abordar los desafíos electorales.
Según consignó The Clinic, Mulet, cuya tienda, la Federación Regionalista Verde Social (FRVS), vería en riesgo su existencia con la iniciativa de los senadores, advirtió que el apoyo a esa reforma impulsada por el Socialismo Democrático y Chile Vamos podría afectar el ánimo de conformar una lista conjunta con todo el oficialismo. De acuerdo con el citado medio, la preocupación de la FRVS y la propuesta de Mulet no obtuvieron una buena recepción. Si bien algunos partidos se mostraron abiertos a discutir, personeros del PS y del PC no mostraron la misma disposición.
Exponiendo una mirada más crítica, la diputada Carolina Tello (FA), integrante de la Comisión de Gobierno, afirmó a este medio que el proyecto de la Cámara es “una propuesta parcial que no incorpora temas tan relevantes como la paridad de género”.
“La mayoría de los análisis tienden a centrarse en problemas como la falta de disciplina partidaria, las tensiones entre el Ejecutivo y el Legislativo, la fragmentación de partidos políticos, entre otros”, explicó. Como Frente Amplio, añadió, “hemos enfrentado este tema a través de la fusión”.
Los aspectos fundamentales de un sistema político saludable, según la diputada Tello, son: participación política de las mujeres, representación efectiva, gobernabilidad y participación ciudadana activa.
“Desde el Frente Amplio hemos insistido en que una reforma debe ir más allá de resolver problemas estructurales internos y avanzar hacia un modelo que garantice legitimidad y conexión con las demandas de la ciudadanía. Esto implica incorporar medidas como paridad de género, mecanismos de participación ciudadana y reformas que fortalezcan las instituciones, permitiendo una gobernabilidad efectiva que responda a los desafíos sociales actuales”, complementó.
Para la parlamentaria frenteampista, “necesitamos abordar integralmente los problemas del sistema político, asegurando que los cambios propuestos representen un avance real hacia una democracia más inclusiva, legítima y funcional”. En ese sentido, concluyó, “estamos abiertos al diálogo con todas las propuestas, pero subrayamos que la prioridad debe ser el fortalecimiento institucional y la respuesta efectiva a las demandas sociales”.
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