La semana en que resucitaron las aspiraciones presidenciales de Tohá

En medio de una semana intensa para el Gobierno, la figura de la ministra del Interior, Carolina Tohá, acaparó la atención no solo por protagonizar este lunes la promulgación de la ley que creó el Ministerio de Seguridad Pública, sino que además, porque nuevamente dejó la puerta abierta para una eventual candidatura presidencial. Decisión que, según confirmó, la tomaría en marzo. 

Esto, luego de que la comisión política del Partido por la Democracia (PPD) solicitara formalmente a la secretaria de Estado “ser la candidata presidencial del Socialismo Democrático”, de cara a las primarias oficialistas que se realizarán el próximo 29 de junio. 

Al respecto, Tohá señaló que “no es una decisión que esté tomada”, aunque reconoció que no queda mucho tiempo para tomar definiciones y que marzo sería el mes para aquello.

“Esto no es una aventura personal, es colectivo (…) si yo hubiera descartado esto, lo hubiera dicho hace mucho rato. Si estuviera decidido me hubiera ido hace mucho tiempo también. Hay que decidirlo y hay muchos factores que considerar”, dijo en entrevista con 24 Horas. 

En ese contexto, la solicitud del PPD para que la exalcaldesa de Santiago sea la abanderada del Socialismo Democrático, no ha estado exenta de polémicas, esto porque -según lo señalado en la declaración emitida esta semana- buscarían que se convierta en la candidata única entre la colectividad y el Partido Socialista. Algo que no fue bien recibido en el Partido Socialista que encabeza Paulina Vodanovic.

Desde el PS calificaron la propuesta como improvisada, considerando además que el pasado 14 de diciembre su comité central definió presentar un abanderado propio en las primarias, a la espera de los últimos intentos para que Michelle Bachelet se convierta en la carta del partido.

Otro de los factores que distancia a los socialistas es el mal desempeño de Tohá en las encuestas, algo que afecta a la mayoría de las cartas oficialistas que están sobre la mesa. 

PPD defiende carta Tohá 

En conversación con El Mostrador, el exministro, militante PPD y actual presidente del directorio de TVN, Francisco Vidal, señaló que el actual escenario de fragmentación implicaría que si cada partido del Socialismo Democrático (socialistas, liberales, radicales y PPD) lleva una candidatura propia a la primaria, “por razones obvias de correlación de fuerzas y datos de la última elección territorial, cada uno de esos candidatos perdería ante la carta del Frente Amplio”. 

En esa línea -y considerando que el Partido Liberal y Radical ya decidieron llevar candidato propio-, a juicio de Vidal es necesaria la unidad “para tener alguna expectativa de que el candidato socialista y PPD triunfe en la primaria sobre la fuerza individual más poderosa que es el Frente Amplio”. “Quien no entienda eso, está equivocado”, dijo. 

Consultado por el bajo respaldo de la ministra Tohá en las encuestas, el también integrante de la comisión política del PPD afirmó que cuando se evalúan a los personajes públicos, se hace “en términos de su contexto, del tema que abordan, de la seguridad ciudadana en este caso. Pero después empieza la evaluación sobre lo que ese candidato o candidata le ofrece al país”.

“La campaña cambia la percepción de la opinión pública que se tenía antes de ese liderazgo. Y ejemplos hay demás, pero para qué irse tan atrás, basta con el ejemplo del propio Presidente Boric en las elecciones pasadas”, agregó. 

Un elenco poco competitivo bajo el fantasma de Bachelet

Si bien hay un consenso transversal entre las fuerzas oficialistas para convocar a un primaria presidencial lo más amplia posible, la principal preocupación es que el elenco de candidatos resulte poco competitivo frente a la figura de Evelyn Matthei en una primera vuelta. Los cálculos incluso apuntan hasta nueve nombres en la papeleta.

Los ya proclamados Vlado Mirosevic (PL) y Jaime Mulet (FRVS), el PPD con la carta de Carolina Tohá, mientras que en el PS sondean nombres como Paulina Vodanovic, Álvaro Elizalde, e incluso el del gobernador Claudio Orrego, en el caso de una nueva negativa de la expresidenta Bachelet, el Partido Radical apostaría por la figura del exministro José Antonio Gómez, a lo que se sumarían las definiciones del FA, PC y Acción Humanista. 

Por su parte, parlamentarios de la DC solicitaron formalmente al presidente de la colectividad, Alberto Undurraga, que asuma como abanderado de la falange. El diputado democratacristiano se ha manifestado contrario a las aspiraciones de unidad, instalando la idea de dos primarias en el sector. 

Algo que ha sido rechazado por parte de representantes oficialistas, quienes buscan replicar la alianza amplia de la municipales. “Si tenemos dos candidatos de las fuerzas oficialistas dividiendo sus votos en primera vuelta, es posible que pasen a una segunda vuelta Evelyn Matthei y alguno de los dos K: Kaiser o Kast”, advirtió Francisco Vidal. 

“Ante tanta dispersión, la única que podría alinearnos a todos es la expresidenta Michelle Bachelet, estoy seguro de que la mayoría de los partidos se cuadraría bajo su figura. Y considerando el actual escenario de desventaja frente al posicionamiento de Matthei, es algo que debería reconsiderarse”, confiesa un parlamentario oficialista. 

Lo cierto, es que la exmandataria ha descartado en reiteradas ocasiones la posibilidad de volver a postularse. No obstante, en el PS hay dirigentes que no pierden la esperanza de que pueda representar al partido en la papeleta, por lo que están a la espera de un encuentro entre ella y la directiva “para tratar de convencerla”. 

“Casarse tempranamente con alguien que no marca es un suicidio”

Para el sociólogo y director de Tú Influyes, Axel Callís, “es de poca eficacia política” llevar candidaturas que no estén marcando en las encuestas. “Eso ya pasó con Yasna Provoste, Paula Narváez y una serie de otros candidatos”, dijo. 

El experto electoral señaló que si incluso una figura como Carolina Tohá llega a subir 10 puntos en marzo, “el problema es que eso no garantiza que llegue dentro de los dos primeros en la primera vuelta. Y eso sería un desastre para el Gobierno, para la izquierda, para la centroizquierda y para todos. Si el problema no es que marque dos puntos, el problema es que puede quedar de tercera o cuarta”.

En esa línea, Callís afirmó que “casarse tempranamente con alguien que no marca es un suicidio”, por lo que el oficialismo debería apostar por la “eficacia electoral” a la hora de definir sus candidaturas. 

“La única forma que tiene la centroizquierda e izquierda de evitar el desfonde parlamentario es con una candidatura competitiva única. El riesgo no es perder la presidencia, el riesgo es que la derecha logre los cuatro séptimos en la Cámara de Diputados. Eso sería una tragedia. Y una candidatura no competitiva, que llegue tercera o cuarta, podría llevar a eso”, sentenció.