
Ministro Diego Pardow: “Las tarifas de la luz tendrán un incremento del orden de un 7%”
Debido al aumento del precio de dólar, el ministro se Energía adelantó que las cuentas de la luz tendrán un incremento de magnitud del orden del 7%. Esta alza se agrega a los tres aumentos en las tarifas de la energía eléctrica producto de la estabilización de precios y que ya suman un 60%.
No cabe duda de que para muchos hogares un nuevo aumento en las tarifas de luz será como un balde agua fría… uno sobre ropa que ya está húmeda y en invierno.
Luego del descongelamiento de las tarifas de la energía eléctrica –que se mantuvieron sin variaciones primero por el estallido y luego de la pandemia–, que desencadenó tres aumentos tarifarios en un período de seis meses, el ministro de Energía, en entrevista con El Mostrador, confirmó que durante el segundo semestre se dejará caer una nueva alza en las cuentas de luz de los consumidores.
“Los precios de la luz se congelaron en 2019 y el descongelamiento tuvimos que hacerlo en un espacio de seis meses, pero una vez que termina el proceso de descongelamiento, lo que toca es esta normalidad tarifaria anclada al dólar y a los precios internacionales de los combustibles. Que es lo que vamos a empezar a observar durante el segundo semestre con un aumento del orden del 7%”, aclara de entrada Pardow.
En efecto, durante esta jornada la Comisión Nacional de Energía publicará el Informe Técnico Preliminar de Fijación de Precios del Sistema Eléctrico Nacional (SEN), el que dará a conocer un alza de las tarifas eléctricas cercana a un 7.3% en promedio
-Los tres aumentos tarifarios destinados a estabilizar los precios hicieron que las cuentas de la luz subieran casi un 60%. Ahora, subirá otro 7%. ¿A qué responde esta nueva alza?
-Una vez estabilizado el proceso de estabilización, entramos en un proceso de normalidad tarifaria. ¿Qué significa eso? Que las tarifas se ajustan dos veces al año. Y el primer ajuste de este año ya ocurrió, porque es el último del proceso de estabilización, que es de enero. El siguiente es para la segunda mitad del año, y lo que refleja es esencialmente el comportamiento del tipo de cambio del dólar.
El tipo de cambio se ha comportado de manera desfavorable para el peso, o sea, ha aumentado el tipo de cambio y eso significa que debería impactar en las tarifas eléctricas en el segundo semestre, como dije, en el orden de un 7%, porque el término del proceso de estabilización se produce con un tipo de cambio del orden de los $920 y lo que estamos viendo, cuando miramos algunos meses atrás, es más bien un promedio del orden de los $970. Entonces, corresponde un ajuste de esa naturaleza hacia la segunda mitad del año.
-Cuando se produjo la última alza a comienzos de año, usted, sin embargo, habló de que a partir de ese momento vendría una estabilidad de los precios que podría mantenerse hasta el 2028.
-Efectivamente, hablé de una meseta, pero que esta meseta iba a depender de dos factores a los cuales están ancladas nuestras tarifas: los precios internacionales de los combustibles y el valor del tipo de cambio. Utilicé específicamente el ejemplo de que, si en una ventana de seis meses el tipo de cambio bajaba, uno iba a observar una disminución en los precios de la electricidad. Y si el tipo de cambio al revés subía, lo que uno iba a observar era un aumento de los precios de la electricidad. Y eso es efectivamente lo que está ocurriendo.
-¿Y las tarifas eléctricas necesariamente tienen que estar ancladas al tipo de cambio?
-Si quisiéramos desanclar nuestras tarifas de estos factores internacionales es una pregunta legítima, pero no puede resolverse de un día para otro. Son procesos institucionales que, si buscamos abordarlos, van a ser graduales y van a tener un horizonte de incorporación. Y en todo caso tiene ventaja y desventaja. El anclaje al precio internacional de los combustibles se hizo después de la crisis del gas argentino, hace unos 15 años, una cosa así. Ya para despejar esa incertidumbre se establecen estos polinomios de indexación hacia los precios internacionales de los hidrocarburos. Y el anclaje al dólar es una manera de eliminar la incertidumbre cambiaria.
Si queremos internalizar la incertidumbre cambiaria, eso se puede hacer. Pero es de nuevo algo que tiene ventajas, desventajas y que requiere una discusión un poquito más extensa. No es algo que dependa ni de la voluntad de un ministro, ni es algo que se pueda resolver de un día para otro.
VAD: la otra alza en el horizonte
El alza del 7% promedio no será el único reajuste que impactará en el bolsillo de lo consumidores. Este miércoles, la Contraloría tomó razón del decreto del Valor Agregado de Distribución (VAD) del periodo 2020-2024. El retraso de esta publicación produjo una deuda que deberá ser reliquidada
-¿Qué impacto tendrá en las tarifas de la luz la reliquidación del VAD?
-Esto es un decreto que debe haber entrado en vigor a fines del 2020. Lo recibimos con un atraso significativo, que se recuperó, se sacó adelante, y ayer efectivamente se tomó razón del decreto. Esto abre ahora un espacio donde tenemos que levantar la información de las diferencias de facturación que se deben producir y los saldos a favor y en contra de las distribuidoras y sobre esa base diseñar un mecanismo de reliquidación.
-¿Se trabaja en alguna fórmula para disminuir el impacto?
-Vamos a trabajar esto, obviamente, en conjunto con las asociaciones de consumidores y otras de distribución y las cooperativas eléctricas. Y el llamado, en particular a la empresa, es a que evaluemos estos mecanismos con la mayor flexibilidad posible. Porque como venimos saliendo de un proceso de estabilización, esta reliquidación tiene que hacerse considerando condiciones objetivas.
Vamos a hacer un trabajo colaborativo y una propuesta, y esperamos que haya apertura de parte de las empresas, porque hay que ser muy cautelosos en la situación de los precios de la electricidad y tratar en lo posible de proteger a los consumidores de nuevas alzas que también repercuten en la cuenta final.
-¿Entonces sí o sí va a tener entonces un impacto?
-Por cierto que sí, tiene que tenerlo. El punto es que vamos a intentar que los órdenes de magnitud se mantengan dentro de los espacios de lo que se ha conversado durante el proceso de estabilización. El llamado a las empresas de distribución y a las cooperativas es que miremos esto con flexibilidad y capacidad de diálogo.
-¿Y cuál es el espacio temporal para que se den esas conversaciones antes de saber cuál va a ser el costo final para el consumidor?
-Va a tomar un tiempo todavía, porque es necesario solicitarles la información a las empresas. No todas, por cierto, hay que entender que en el mundo de la distribución hay empresas muy distintas, como las distribuidoras eléctricas de las grandes ciudades y las cooperativas que trabajan en la ruralidad. Tienen diferencias en la forma de llevar la información y sus procesos de contabilidad, en que a veces las recopilaciones de información también toman tiempo.
Deben pasar todavía varios hitos. La toma de razón es uno de estos. La misma Contraloría solicita o ordena una nueva publicación del decreto. Ya estamos pidiendo fecha en el Diario Oficial, pero eso siempre toma un par de semanas. Después habrá el proceso de recolección de información y, finalmente, el diseño del instrumento.