No debiese sorprender en demasía que vuelva nuevamente a la palestra el temita aqu
No debiese sorprender en demasía que vuelva nuevamente a la palestra el temita aquel de la periodista del Sálvese Quien Pueda, Carola Julio. De seguro en los próximos días se volverán a imprimir cientos de páginas con su rostro y con el de su actual pareja, el empresario Rodrigo Danús.
Es que la rubia periodista está embarazada de casi 4 meses. Este rumor, que venía circulando en los medios periodísticos hace unos dos meses, fue confirmado hace poco luego que fuentes cercanas a este medio se enteraran de la verdadera razón por la que han ocultado esta noticia: la ex señora del empresario, Marisol Massad, aún no firma la nulidad matrimonial. Y mientras eso no suceda, la pareja no podrá contraer nupcias.
Por eso resultaba extraño que Julio, que acostumbra a contar intimidades de su vida a los medios y el propio de Danús, dueño de la productora Broadeyes que se especializa en realizar programas faranduleros y ligados a la vida íntima de las personas, no hayan comentado nada acerca de esta fortuita y feliz novedad.
Hoy se ve a la periodista con ropajes bastante menos ajustados que otrora y Danús se encuentra enfrascado en un complejo proceso de anulación de su matrimonio con Marisol Massad, sobrina del actual presidente del Banco Central, Carlos Massad.
Es por eso que no han querido comentar nada y han ocultado el embarazo para evitar que Marisol se entere de esta noticia y firme de una buena vez la nulidad. Para obtener la firma de su ex señora, Rodrigo Danús ha debido ceder a su ex cónyuge la actual casa que ocupa junta a su hija María Ignacia, de 4 años, en La Dehesa, el departamento que compraron hace un par de años en San Alfonso del Mar en Algarrobo y donde pasaban sus vacaciones, un auto y cerca de dos millones de pesos mensuales de pensión familiar.
Estos arreglos contractuales se iniciaron a fines del año pasado cuando Danús ya demostraba serias intenciones de formalizar el romance con la periodista. Sin embargo, la aparición pública de Julio en diversos medios de comunicación por problemas con Ahubet a raíz de Cristián Castro y con el equipo del programa hicieron que las conversaciones entre los abogados de ambas partes se dilataran ante la furia silenciosa de Massad.
Evidentemente, durante el año el empresario ha intentado por todos los medios de obtener la nulidad, situación que se precipitó tras el embarazo de Carola. Según fuentes cercanas al empresario, durante los próximos días debiesen firmarse todos los papeles para poder desligarse de su enlace anterior. He ahí el silencio de la pareja.
La historia
Danús y Julio se conocieron cuando la rubia periodista hacía su práctica en De pé a pá y la historia comienza a andar cuando en uno de los tantos viajes que el empresario realiza semanalmente a Miami, se encuentra en pleno avión con la periodista que iba a casa del cantante azteca, en una de las tantas estadías que Castro le auspició.
Dicen las malas lenguas -que a esta alturas son bastante majaderas- que iba en "turista" y que el muy gentil empresario hizo que lo acompañara en su viaje en primera clase. Desde entonces no se volvieron a separar. De hecho, Danús la llevó a la vuelta de esa estadía a trabajar a la productora de espectáculos en ciernes.
El empresario dueño de S. W. Consulting, la productora Broadeyes además de varias participaciones en diversas empresas en nuestro país, estuvo casado cerca de 8 años con Marisol Massad. Durante varios años intentaron tener familia -casi cinco para ser exactos- hasta que nació María Ignacia (4) separándose a los meses de nacida la niña.
Posteriormente a esta separación, Danús comienza a vivir frenéticamente su soltería manteniendo diversas parejas, entre ellas Cecilia Bolocco, con la que después tuvo una relación comercial, hasta que su obsesión y atracción por la blonda coanimadora de "SQP" lo pusieron en pie de guerra hasta conquistarla.
Durante los primeros meses del romance, la periodista no mostró demasiado interés en Danús pero era cortejada constantemente con invitaciones a comer, fines de semana en la playa, ropas al por mayor, viajes constantes a Miami y cuantiosos regalos como un reloj Cartier tasado en 2 millones de pesos.
En esos tiempos Julio se dejaba querer mientras esperaba que volviera su antiguo amor, a sabiendas el actor Rodrigo Rochet -del cual por cierto no se podía hablar en el programa- a Santiago para continuar el romance que habían iniciado y que quedó trunco desde el momento en que juntos viajaron a buscar nuevos horizontes en Estados Unidos. De hecho en ese viaje la periodista habría establecido una serie de contactos en Televisa para radicarse allá y tener su propio programa.
Sin embargo, necesitaba pantalla para poder demostrar en la cadena mexicana que su rostro bien valía un programa. Y evidentemente, su incursión en Sálvese quien pueda era el pasaporte necesario para cumplir sus metas y Danús sabía que no tenía mucho tiempo para convencerla que se quedara a su lado y no partiera a Estados Unidos.
Poco a poco Julio se fue entusiasmando hasta que en noviembre del año pasado la relación se transformó en pololeo. Tanto era el amor que le profesaba el empresario que incluso se llevó a la familia entera de Julio al departamento que arrendó en Reñaca para pasar las vacaciones; además de pasarle uno de los dos Porshe que tenía, decidió comprar un tercer auto, al parecer una camioneta Pathfinder, para que la periodista se pudiese desplazar con tranquilidad y no siguiera siendo objeto de burlas dentro del medio periodístico que se ufanaba con sus travesías reporteriles sobre el descapotable.
Los primeros rumores sobre el supuesto embarazo se produjeron hace cerca de tres meses, cuando al interior de la productora surgieron las voces que señalaban las constantes ausencias de Carola, la búsqueda de doctor y clínica -aunque podría haber sido para un retoque corporal pedido nuevamente por el empresario- y la rápida decisión de la pareja de buscar casa para irse a vivir juntos. De hecho, una corredora de propiedades confirma que les mostró varias casas en La Dehesa cercanas a los 400 metros cuadrados, pero la blonda reportera prefería una de 600 metros.
Desde entonces Danús y Julio habrían decidido tratar de mantener en el más estricto secreto el embarazo para que la ex señora del empresario firmara de una buena vez la nulidad. Así, el romance que comenzó en noviembre del año pasado cuando la ex de Cristián Castro llegó a formar parte del equipo del programa Sálvese quien pueda y que estuvo lleno de hitos polémicos espera tener un final feliz durante las próximas semanas, cuando Danús consiga deshacer el vínculo.
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