La carta más visible hasta ahora que se ha fraguado las últimas semanas para postular a la alcaldía de Ñuñoa es la ex ministra de Salud, Helia Molina (PPD), que salió del gabinete hace poco más de un año por sus descarnadas declaraciones públicas en las que cuestionó los abortos encubiertos que se realizan en las clínicas privadas.
La salida anticipada de Pedro Sabat (RN) de la alcaldía de Ñuñoa, despertó las expectativas en la Nueva Mayoría sobre la posibilidad de recuperar el emblemático municipio en los comicios de octubre. La carta más visible hasta ahora que se ha fraguado las últimas semanas es la de postular a dicho sillón edilicio a la ex ministra de Salud, Helia Molina (PPD), que salió del gabinete hace poco más de un año por sus descarnadas declaraciones públicas, en las que cuestionó los abortos encubiertos que se realizan en las clínicas privadas.
Si bien la primera opción del PPD por meses fue el actual alcalde de Lo Prado, Gonzalo Navarrete, con quien el partido sondeó el tema durante varios meses, la idea no prosperó debido a que el actual jefe comunal debería convertirse en el sucesor de Jaime Quintana para dirigir el partido los próximos dos años.
Molina fue sondeada en paralelo como posible candidata a Cerro Navia, pero esta semana finalmente se selló el acuerdo entre el PPD y la ex ministra para que compita por Ñuñoa, municipio que desde 1996 ha estado en manos de RN y puntualmente de Sabat.
La única vez que la Nueva Mayoría logró hacer temblar a Sabat y poner en duda su liderazgo comunal en las urnas, fue en las municipales de octubre del 2012, cuando Maya Fernández Allende destronó por unas horas al alcalde RN, quien impugnó el resultado ante el Tricel, el que finalmente lo restituyó en el sillón municipal.
La candidatura de Molina –quien vive en Ñuñoa– debe sortear ahora la negociación electoral de la Nueva Mayoría, en la que se debe definir qué partido del pacto tendrá el candidato a alcalde en cada comuna y que deberá ser respaldado por todas las colectividades de la coalición.
En diciembre del 2014, Molina –doctora de profesión– dio una entrevista al vespertino La Segunda, en la que como ministra de Salud aseguró que “en todas las clínicas cuicas muchas familias conservadoras han hecho abortar a sus hijas”, lo que generó una fuerte crítica desde los sectores contrarios a legislar sobre fórmulas y condiciones para la interrupción del embarazo.
Si bien el Minsal emitió una declaración pública en la que catalogó como opiniones personales y no institucionales las polémicas palabras de Molina, La Moneda finalmente terminó sacando a la doctora PPD del cargo.
