En la escueta misiva que Rebolledo envió al PPD cuestionó el giro a la izquierda que a su juicio ha dado el partido. “Soy pluralista y tolerante, y no descalifico el giro a la izquierda del Partido, que has encabezado con el Senador Girardi, pero bajo vuestra conducción el PPD ha devenido en un actor político para mi irreconocible».
Un histórico del partido, también de la primera década de la Concertación. Ex ministro y ex parlamentario, lideró incluso en los 90 una de las corrientes internas del PPD, Víctor Manuel Rebolledo mandó el 10 de diciembre una carta al timonel de la colectividad, Jaime Quintana, en la que pone fin a su militancia de 28 años a las filas del Partido Por la Democracia porque “ha dejado de ser un partido que me interprete, esa es la clara y sencilla razón de mi decisión”.
En la escueta misiva que Rebolledo envió al PPD cuestionó el giro a la izquierda que a su juicio ha dado el partido. “Soy pluralista y tolerante, y no descalifico el giro a la izquierda del Partido, que has encabezado con el Senador Girardi, pero bajo vuestra conducción el PPD ha devenido en un actor político para mi irreconocible, ubicado en la punta del ala izquierda de la Nueva Mayoría, abandonando los elementos identitarios de fuerza política progresista, democrática, ciudadana y renovada con que lo fundamos cuando soñábamos convertirlo en el primer partido político del siglo XXI”, reza el texto.
Rebolledo, inició su carrera política en el Partido Radical y a finales de la década del 80 fue uno de las figuras centrales en la fundación del PPD, dos veces diputado por la IV Región, ministro vocero del gobierno de Eduardo Frei, embajador de Chile ante la FAO. Desde que Quintana asumió la presidencia del partido, ha sido público su distanciamiento con la colectividad y el discurso que ha adquirido la tienda. “Yo aun a riesgo de ser excomulgado por Pancho Vidal, confieso que sigo siendo socialdemócrata, sigo creyendo que los derechos humanos son una conquista de la conciencia universal, en cuya defensa no caben dobles estándares. Por eso creo que Leopoldo López es un preso político, y creo que en su momento deberías haber recibido a Rosa María Paya cuando estuvo en Chile (…) No quiero seguir siendo parte del periplo regresivo a la impronta de la izquierda sesentera, que para construir igualdad, inventó numerosas teorías de como talar el bosque de la renta nacional, sin abordar nunca un diseño y compromiso riguroso de como plantar los árboles. Creo que del mismo modo que el chorreo no producirá jamás cohesión social y será fuente de desigualdad, los enfoques redistributivos de la renta nacional no irán a ninguna parte si no se sustentan en un compromiso sólido y responsable con su crecimiento”, agrega la carta de renuncia que envió al partido.
En el PPD afirmaron que la renuncia de Rebolledo tuvo un impacto “cercano a cero”, que ya “no era muy querido en el partido” por su vinculación con el polémico Caso Coimas, que estalló durante el gobierno de Ricardo Lagos, en el cual fue condenado como coautor de cohecho a 300 días de pena remitida, una multa de 30 millones de pesos y la inhabilitación perpetua para ejercer cargos públicos. El Caso Coimas -que fue investigado por el juez Carlos Aranguiz- estalló el año 2002, con la denuncia del empresario Carlos Filippi de tener que pagar 15 millones de pesos al entonces subsecretario de Transporte, Patricio Tombolini, para obtener la aprobación para operar una planta de revisión técnica en Rancagua, pago que fue gestionado por Rebolledo.