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El mal cálculo de Matías Acevedo que tiene en vilo a la Dirección de Presupuestos

El mal cálculo de Matías Acevedo que tiene en vilo a la Dirección de Presupuestos

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La soberbia de la que lo acusan sus detractores en el Gobierno va más allá, porque sostienen que habría calculado mal la recaudación fiscal y es por eso que “ahora está desesperado buscando de dónde sacar plata”, manifestó una fuente que prefiere mantener en reserva su nombre. Tanto así que habría un nuevo recorte en las próximas semanas, que se sumaría a los ajustes fiscales realizados a mediados de marzo por US$ 458 millones y luego, a fines de abril, otro por US$ 2.055 millones adicionales. Sin embargo, estos no serían suficientes y los “damnificados” (aparte de la población) son algunos ministerios «gastadores», como Transportes y Telecomunicaciones. En el Ejecutivo además cuestionan que Acevedo se haya enfrentado con quien tiene que «firmar» el Presupuesto cada año, el senador Carlos Montes, refiriéndose con esto al exabrupto que protagonizó cuando acusó al parlamentario PS de generar un ambiente «belicoso» en pleno trámite del erario 2021.


De todo el mundo con que se habla en el Gobierno sobre el manejo de la Dirección de Presupuestos (Dipres), son poquísimos los que tienen una opinión positiva del actuar de su director, Matías Acevedo Ferrer. Acaba de cumplir un año en ese puesto, tras la salida de Rodrigo Cerda el 12 de diciembre de 2019, y las críticas por su estilo “prepotente” se han incrementado en los últimos meses.

Aunque nadie niega que le correspondió un momento difícil y debió usar la tijera presupuestaria sin miramientos, en medio de los ajustes fiscales por la pandemia del COVID-19, las autoridades consultadas se quejan de la “actitud unilateral” de Acevedo a la hora de resolver qué proyectos son eliminados. Ni siquiera existe la posibilidad de conversar acerca de las prioridades, advierten en varios servicios y secretarías de Estado, porque el director toma las decisiones sin consultar a los afectados.

En función de sus facultades, Acevedo exigió el reintegro de los recursos existentes en las cuentas de los ministerios, creando un fondo que él maneja en forma discrecional y para acceder a esas platas la burocracia se ha hecho más compleja y se ha ralentizado todo el proceso.

La soberbia de la que lo acusan sus detractores en el Gobierno va más allá, porque sostienen que habría calculado mal la recaudación fiscal y es por eso que “ahora está desesperado buscando de dónde sacar plata”, manifestó una fuente que prefiere mantener en reserva su nombre. Tanto así que habría un nuevo recorte en las próximas semanas que se sumaría a los ajustes fiscales realizados a mediados de marzo por US$ 458 millones y luego, a fines de abril, otro por US$ 2.055 millones adicionales. Ambas medidas de ajuste fiscal deberían haber significado una reducción del gasto de US$ 2.513 millones.

Sin embargo, este no sería suficiente y los “damnificados” (aparte de la población) son algunos ministerios «gastadores» de presupuesto, como Transportes y Telecomunicaciones. Los que se salvan en este «tijeretazo» son los ministerios inversores, como Obras Públicas, Salud, Vivienda y la Subsecretaría de Desarrollo Regional (Subdere), cuya ejecución presupuestaria es alta.

El estilo de este ingeniero comercial de la Universidad Gabriela Mistral, con mención en economía y MBA de la Universidad de Chicago, no solo saca ronchas al interior del Gobierno, sino también en la oposición. En ese sector político lo encasillan como la típica autoridad que “no sabe, que es soberbia y que le cuesta aprender”.

Y en el Ejecutivo cuestionan que se haya enfrentado con quien tiene que «firmar» el Presupuesto cada año, el senador PS Carlos Montes, refiriéndose con esto al exabrupto protagonizado por Acevedo cuando acusó al parlamentario socialista de generar un ambiente «belicoso» y lanzó una frase que aún recuerdan en el Senado: «No pretendo estar en el barro con él». Obviamente, Montes le respondió, señalándole que hacía “caer el debate a un nivel que no es propio”. Ese round no terminó ahí e incluso la Sala del Senado suspendió por algunos minutos –el pasado 9 de noviembre– la sesión en la que discutía el Presupuesto de 2021, ante la negativa de los senadores socialistas de permitir el ingreso de Matías Acevedo.

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