Publicidad
La noche negra de la agencia «regalona» de la derecha

La noche negra de la agencia «regalona» de la derecha

Publicidad

La Municipalidad de Santiago no fue la única derrota. Vía Central también tuvo a cargo la candidatura del RN Guido Benavides, en Ñuñoa, quien obtuvo el 29,33% de los votos, los que no fueron suficientes, porque la alcaldía –que durante 24 años fue parte de los bastiones de la derecha– quedó en manos de la abanderada de RD, Emilia Ríos, con el 31,85% de los sufragios. Otra candidatura que «no vieron venir», agregaron.


No solos los partidos políticos de Chile Vamos tuvieron una noche negra el domingo tras el recuento de votos de las megaelecciones de constituyentes, gobernadores regionales, alcaldes y concejales. También fue una jornada para el olvido para algunos asesores y agencias «predilectas» del sector, que vieron con estupor cómo eran derrotados sus «clientes-candidatos», un fracaso que –igual que la coalición oficialista– no vieron venir.
Vía Central Comunicaciones es una agencia que fundó María Irene Chadwick, hija de Herman y sobrina del Presidente, Sebastián Piñera, después que terminó la primera administración de su tío en La Moneda, donde cumplió la tarea de directora de programación de Palacio. Conformó un equipo con Gonzalo Gómez, el exsubdirector de prensa de Presidencia en el Gobierno piñerista.
Dadas las redes familiares y políticas de María Irene Chadwick, la agencia comenzó a instalarse en la derecha como una de las favoritas de Chile Vamos. Es más, en las municipales del 2016 trabajaron tras la candidatura de Felipe Alessandrí (RN), quien ganó en ese momento la alcaldía de Santiago.
La noche del domingo, comentaron en la propia derecha, se les dio vuelta la tortilla, porque Alessandri perdió el emblemático municipio en manos de la PC, Irací Hassler. Fue una derrota que dolió especialmente en RN, donde había molestia por el resultado, al que le atribuyeron responsabilidad a los «gurús» de Vía Central, los que –contaron– habrían errado los focos de la campaña, «no supieron leer la calle, porque nunca fueron», y minimizaron absolutamente a la candidata comunista, pese a que hacía varias semanas se habían prendido las alarmas en el sector.
Pero Santiago no fue la única derrota. Vía Central también tuvo a cargo la candidatura del RN Guido Benavides, en Ñuñoa, quien obtuvo el 29,33% de los votos, los que no fueron suficientes, porque la alcaldía –que durante 24 años fue parte de los bastiones de la derecha– quedó en manos de la abanderada de RD, Emilia Ríos, con el 31,85% de los sufragios. Otra candidatura que «no vieron venir», agregaron.
A la lista negra se sumaron las derrotas del candidato independiente en la Lista de Chile Vamos, Juan Carlos Gazmuri, en Independencia, que solo obtuvo un 22%, ante el 54% con que se reeligió el alcalde, Gonzalo Durán. Y la del abanderado independiente en Puerto Varas, Renato Aichele (26,57%), quien sucumbió ante otro independiente, Tomás Gárate, quien con el 28,51% de los sufragios se quedó con la alcaldía.
De la lista de clientes, el único que no perdió fue el alcalde de Zapallar, Gustavo Alessandri, quien antes de la campaña abandonó los servicios de la agencia y logró cómodamente su reelección con el 59%.
La noche de este domingo 16 de mayo no fue el único revés que ha tenido esta agencia. En la derecha contaron que en Vía Central fueron los ideólogos tras bambalinas de la campaña comunicacional del Rechazo para el plebiscito del 25 de octubre. El resultado ya es historia.
Publicidad

Tendencias