Milton Lee, quien durante el 2000 fue el encargado de finanzas del Partido Socialista, prestó servicios para la campaña de primera vuelta del Presidente Boric, a través de su empresa Alerce Talleres Gráficos S.A., por un monto cercano a los $170 millones. El punto es que este mismo personaje, a través de la misma empresa, fue querellado por el Servicio de Impuestos internos por presentar 8 boletas falsas por conceptos de impresión, cuyos montos fueron desviados a campañas políticas. Lee fue sobreseído, no porque fuera encontrado inocente, sino porque el delito se consideró prescrito.
En el marco del escándalo que generaron las declaraciones de la excandidata a gobernadora y senadora del partido Comunes, Karina Oliva, en las que, de acuerdo a diversas versiones de prensa, habría sostenido la existencia de facturas irregulares en la rendición de gastos electorales del excandidato presidencial Gabriel Boric –hoy Presidente de la República–, cabe recordar que en el listado de rendiciones que se encuentran aprobadas por el Servicio Electoral (Servel) y que corresponden a gastos de campaña de la primera vuelta presidencial, hay un nombre que no debería estar ahí, porque implica un conducto que lleva directamente a la gran polémica del 2016 sobre financiamiento ilegal de la política. Se trata de Milton Lee Guerrero, boletero de SQM.
En efecto, Milton Lee, quien durante el 2000 fue el encargado de finanzas del Partido Socialista (PS), prestó servicios para la campaña de primera vuelta del Presidente Boric, a través de su empresa Alerce Talleres Gráficos S.A., por un monto cercano a los $170 millones.
Aunque en su momento uno de los encargados de la coordinación de los gastos de campaña sostuvo que no valoraron estos antecedentes al momento de encargar los servicios de impresión, no podría menos que conocer el pasado de Lee el jefe de campaña de la primera vuelta presidencial, el actual ministro de la Segpres, Giorgio Jackson, dado que el escándalo de las platas políticas fue señalado por el FA como una de las marcas registradas de la «vieja política» que gobernó el país en los últimos 30 años. Y hay que añadir que el pasado de Lee tampoco es sobrio, pues fue querellado por el Servicio de Impuestos Internos (SII) por presentar boletas falsas y finalmente fue sobreseído, pero no porque fuera encontrado inocente sino porque el delito que se le imputó fue considerado prescrito.
Este es su historia:
En el año del gran escándalo de las platas políticas, el Octavo Juzgado de Garantía de Santiago decretó el sobreseimiento definitivo de Milton Lee Guerrero, investigado por el Ministerio Público como autor de delitos tributarios en el marco del denominado caso Soquimich.
En la resolución, el magistrado Daniel Aravena acogió la solicitud de la defensa, sin oposición del Ministerio Público, y decretó el sobreseimiento definitivo y parcial de Lee Guerrero, por estimar que, a su respecto, se encontraba prescrita la acción penal derivada de los delitos por los cuales el SII presentó querella en su contra en dicha causa.
En la resolución, se agrega que, «lo cierto es que la conducta que se atribuye en la querella al sr. Milton Lee, según se expresó anteriormente, consiste en el haber entregado, en su calidad de representante legal de la sociedad ALERCE TALLERES GRÁFICOS S.A., 8 facturas falsas a la empresa Sociedad Química y Minera de Chile S.A. (SOQUIMICH) por servicios que no fueron prestados a esta sino que al imputado don Carlos Ominami Pascual (sobreseído en la presente causa en relación a los mismos hechos), generando una rebaja artificiosa de la renta líquida imponible que debía declarar y pagar la empresa SOQUIMICH».
Tal conducta se condice con el tipo penal que sanciona –entre otras figuras– al que facilite, a cualquier título, facturas falsas con el objeto de cometer o posibilitar la comisión de los delitos descritos en la misma norma.
De esta manera, Milton Lee Guerrero, pese a ser responsable de delitos tributarios en el marco del financiamiento ilegal de la política, salvó de la persecución penal en su contra por la prescripción del delito. El ex MIR no es nuevo en la impresión de volantería política, de hecho su vínculo con el PS se debe a que su empresa se encargó durante mucho tiempo del material propagandístico de diversas campañas parlamentarias y municipales.
Y si el modus operandi consistió en inflar boletas sobre prestaciones de servicios de impresión para desviar fondos a campañas políticas, para muchos observadores del momento político que vive hoy el joven Gobierno del Presidente Gabriel Boric, no se entiende cómo el exjefe de campaña, el actual ministro Giorgio Jackson, autorizó que se contratara precisamente a Alerce Talleres Gráficos S.A. para la impresión de volantería, habiendo tantas empresas que desarrollan el mismo servicio y que nada tienen que ver con platas políticas.
Según el detalle que se puede ver en la rendición del Servel, Alerce Talleres Gráficos S.A., de Milton Lee, facturó 4 boletas a la campaña de Gabriel Boric.
La primera fue el 10 de octubre de 2019 –a poco más de un mes antes de la primera vuelta– por $10.412.500, por el concepto de «Propaganda impresa y merchandising».
La segunda fue el 2 de noviembre por un monto de $7.140.000, por el concepto de la impresión de 100.000 calendarios de campaña
La tercera fue dos días antes de la elección, el 19 de noviembre, por $120.190.000, por la impresión de volantes y calendarios.
Y la última factura también fue realizada durante el mes de noviembre, por el concepto de impresión de 1.500.000 volantes, por un monto de $27.667.500