Foto de archivo: el nuevo ministro de Economía argentino, Sergio Massa. Por Matias Baglietto/Reuters
En paralelo, Argentina buscará incentivar las exportaciones de las economías regionales mediante la aplicación de un tipo de cambio especial para el sector, lo que también apunta a afianzar las reservas del banco central, según dijo el ministro de Economía Sergio Massa.
Analistas consultados mensualmente por el banco central de Argentina (BCRA) estimaron que la inflación en el 2023 será de 99,9%, una cifra 2,3 puntos porcentuales por encima de la estimación anterior, según informó la entidad monetaria.
La encuesta ‘Relevamiento de Expectativas de Mercado’ (REM) muestra que para el segundo mes del año, los analistas proyectaron una inflación del 6,1%. En enero, el Índice de Precios al Consumidor (IPC) subió 6% de acuerdo al ente de estadísticas oficial INDEC.
A su vez, la encuesta señaló que los especialistas “proyectan una variación real del Producto Interno Bruto (PIB) para 2023 de 0,0%”, 0,5 puntos porcentuales menos que el mes anterior. A su vez, esperan que el tipo de cambio ARS=RASL caiga a 330,47 por dólar a fines de 2023.
El sondeo se realizó entre el 24 y el 28 de febrero entre 40 participantes que incluyen consultoras, entidades financieras y centros de investigación locales e internacionales.
“Para recuperar la competitividad que nos quitó la sequía y las heladas, vamos a implementar esquemas de incentivo exportador, similares a la soja con las economías regionales, empezando por el vino”, dijo el ministro de Economía Sergio Massa, durante un desayuno realizado por la Confederación Vitivinícola Argentina (Coviar).
Argentina instrumentó en septiembre y diciembre de 2022 un incremento en el ingreso de sus divisas ofreciendo un tipo de cambio diferenciado para incentivar la liquidación de los productores de soja.
“Así, desde el 1° de abril, tenemos que tener más vino argentino en el mundo, con la competitividad cambiaria que pone el Estado, y a la vez fortalecer las reservas”, señaló el secretario de Estado, sin dar más detalles sobre la medida.
El país trasandino es el décimo mayor exportador mundial de vinos no espumosos y mostos, con exportaciones que el año pasado totalizaron los 997,4 millones de dólares, según datos de la Fundación Agropecuaria para el Desarrollo de Argentina.
Una severa y larga sequía golpea al campo argentino, uno de los mayores productores mundiales de alimentos.
