Agencia Uno
En 2016 ya enfrentó al mismo tribunal, en Los Ángeles, acusado de porte de arma de fuego, pero fue absuelto, debido a que según los jueces su detención había sido ilegal. Ahora, la Fiscalía de Biobío pide 5 años y 1 día para él y otros imputados. Su padre se encuentra a la espera de juicio, a realizarse en Temuco, lo mismo que su hermano menor.
Para esta mañana está fijado –salvo algún contratiempo– el inicio del juicio en contra de uno de los líderes de la Coordinadora Arauco-Malleco (CAM), Ernesto Llaitul Pezoa, quien está acusado junto a otros cuatro imputados (Nicolás Alcamán, Ricardo Reinao, Eduardo Cornejo y Esteban Henríquez) de haber participado en un ataque incendiario ocurrido en las cercanías del salto del Laja (Provincia de Biobío) el 9 de noviembre de 2021, cuando varios encapuchados armados quemaron tres camiones en el fundo “Punta Arenas”, agrediendo además a, al menos, uno de los conductores.
Llaitul Pezoa fue detenido en Tirúa el 31 de agosto pasado, junto a Esteban Henríquez. A juicio de la policía era el líder indiscutido de los “ORT” (Órganos de Resistencia Territorial de la CAM), pero tanto él como los demás imputados niegan su participación en los hechos, por los cuales el fiscal Juan Yáñez está pidiendo penas de 5 años y 1 día en contra de todos (menos Cornejo, para quien pide 5 años).
Llaitul hijo es considerado en los círculos cercanos a la causa mapuche como el “heredero” político de su padre, con quien se encuentra cumpliendo prisión preventiva en la cárcel de Concepción, dado que Héctor LLaitul Carrillanca fue aprehendido seis días antes que él, en Cañete, acusado de varios delitos por los cuales la Fiscalía de La Araucanía está pidiendo penas que suman 25 años en su contra.
Su juicio, que debía comenzar antes que el de su hijo, se atrasó, sin embargo, debido a que en abril su defensa solicitó acceder a la lista de testigos protegidos y agentes encubiertos que actuaron en el caso. Al igual que como sucedió después en Arica, el tribunal accedió a la petición, pero (a diferencia de lo sucedido en el norte) los defensores no tuvieron acceso inmediato a las identidades y nunca llegaron a tenerlo, pues la Corte Suprema revirtió la decisión.
Además de ellos, un tercer integrante de la familia también está en prisión preventiva: el hermano menor de Ernesto, Pelentaro Llaitul, quien fue aprehendido en noviembre de 2022 luego de un atentado contra un campamento forestal de Chol Chol.
Ernesto Llaitul Pezoa, por cierto, no es primera vez que enfrenta a un tribunal. En 2016 fue detenido en Los Ángeles, portando dos pistolas y municiones. En dicha ocasión, el Tribunal de Juicio Oral en lo Penal local estimó que el procedimiento de la PDI había sido ilegal, pues a juicio de los magistrados no existían indicios suficientes como para haberlo sometido a un control de identidad, por lo que lo absolvieron.
