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Crédito: Agencia Uno
Un plan enfocado en unas 170 empresas proveedoras elabora un equipo de crisis del Ministerio de Economía, supervisado por el secretario de Estado, y está casi terminado para afrontar una posible crisis por el cierre de su principal cliente: Huachipato. Asexma y la Multigremial lo cuestionan.
El Ministerio de Economía, que encabeza Nicolás Grau Veloso (CS), se reunió la semana pasada con representantes de empresas proveedoras de la Siderúrgica Huachipato en la Región del Biobío, el propósito de la cita que reunión a más de 50 Pymes fue abordar un plan en desarrollo económico para evitar que el cierre de la firma acerera tenga repercusiones en los comerciantes abastecedores de ésta.
Un plan enfocado en cerca de 170 empresas que elabora un equipo de crisis del Ministerio de Economía, supervisado personalmente por el secretario de Estado, y ex líder de la Fech está prácticamente terminado para afrontar una posible crisis por el cierre de su principal cliente: Huachipato.
En 2023 fueron alrededor de mil 500 empresas las que vendieron algún insumo a la acerera, de las cuales mil provienen de fuera de la región del Biobío, principalmente de Santiago. De ellas, 83 pymes le vendieron a Huachipato 17 mil millones de pesos en productos.
El plan de control de crisis que se está trabajando tiene distintas dimensiones. La principal tiene que ver con evitar que el cierre de Huachipato implique, en un corto plazo, el cierre de otras empresas. Otra dimensión es “buscar un fortalecimiento de la industria en el Biobío, pero se contempla un plan para 162 empresas entre pequeñas medianas y grandes”
“A través de nuestras distintas políticas de fomento e instituciones de fomento vamos a ayudar a esas empresas a hacer el tránsito hacia nuevos compradores. La forma específica, por supuesto, la vamos a presentar más adelante. Cuando uno está en un desafío de esta naturaleza, que es un desafío complejo, tiene que estar disponible a buscar que estas empresas puedan vender en distintos lugares”, confirmó el ministro Grau Veloso a El Mostrador.
Según explican fuentes ligadas al tema, si bien las empresas grandes vendieron cerca de 42 mil millones de pesos en productos a Huachipato, representan un numero bajo en relación a las ventas de las pequeñas y medianas empresas. Aunque desde el Ejecutivo no se han descartado subsidios, los detalles se espera sean anunciados cerca del 18 de septiembre próximo.
Paralelamente los sindicatos de Concepción han manifestado en las últimas semanas que esperan que el Gobierno active medidas para recuperar los puestos de trabajo “en el sentido de que todo lo que hay público y privado se reactive” debido a la existencia de “proyectos que están estancados” y su reactivación sea “una forma de evitar cesantía“.
Pese a que desde Economía se ha deslizado a las empresas proveedoras que alistan medidas de ayuda ante el cierre de Huachipato, entre las agrupaciones de Pymes y en círculos políticos de el Biobío ya hay muestras de insatisfacción ante el anuncio.
“Cualquiera medida va a ser de parche. Cuando una empresa se liquida o se cierra, hay cientos de proveedores que lo están abasteciendo. Hay casinos e insumos, en el que les provee en un 100%, y cientos de empresas que están bajo el paraguas de Huachipato. Van a tener un impacto y las medidas del gobierno difícilmente van a poder ser una ayuda real. La única salida es siempre mayor plazo o condonar impuestos, algún tipo de medida que sirva de oxígeno para su aspecto financiero”, señala el líder de Asexma, Roberto Fantuzzi a El Mostrador.
Según el empresario, en ocasiones no se puede despedir empleados, tienen años de servicio, y todos los meses se van acumulando deudas tributarias y de leyes sociales, que son los peores, porque son de multas que son impagables por lo que, a su juicio habría que hacer un estudio sobre las leyes sociales” donde las multas son de usura.
En la Asociación de Chilena de Gastronomía (Achiga) hay una visión similar. Según explica uno de sus representantes, Máximo Picallo, una empresa como Huachipato con su impacto en el PIB del Biobío es relevante para todo el ecosistema económico de la zona y va a pegar fuerte en empleos que se pierden.
“No conozco la situación de restaurantes afectados con esto, pero que evidentemente que el impacto es absolutamente negativo y debiera haber una política fiscal para que el impacto fuera menos violento. Recordemos cuando cerró el carbón, entonces lo que hay que hacer es promover la inversión en sectores, es simplificar para que la gente se pueda reconvertir en nuevas empresas y el gran problema que para construir empresas es la “permisología” brutal y la seguridad”, señala Picallo.
En tanto, el presidente de la Multigremial Nacional, Juan Pablo Sweet, explica que el gremio de las pymes valora la iniciativa del Gobierno,”ir en apoyo de solo el 10% de las pymes que prestan servicios para Huachipato nos parece insuficiente”. En su opinión hoy es clave hablar de reconversión y de “incentivos a la inversión, en vez de seguir espantándola, además de proyectos de mediano y largo plazo, ya que claramente el cierre de este tipo de industrias son una gran pérdida para cientos de emprendedores”.
Entre quienes han estudiado en detalle el cierre de Huachipato indican que el impacto en el PIB regional llegará a al menos un 3%.
Hace tres semanas, la siderúrgica informó que ante la imposibilidad de traspasar a precio las sobre tasas al acero chino establecidas por la Comisión Antidistorsión se había decidido la suspensión indefinida de su operación. Huachipato informó entonces que en el caso de los trabajadores, la empresa contaría con un robusto plan de salida, que incluye compensación económica, capacitación y soporte para la reinserción laboral.
