NUEVA CONSTITUCIÓN
Cedida
Esta aprobación implementa en plenitud la solicitud de una Convención Constitucional Sustentable tomando como base una nueva institucionalidad en el país, enfocada en la reducción de emisiones de CO2 y en consecuencia su huella de carbono. Tras la votación, los conocidos como «eco constituyentes» -grupo de 35 convencionales que se propusieron como objetivo trabajar por una Constitución Socio Ecológica y que, en esa línea, solicitaron al pleno de la Convención Constitucional declararse “en Emergencia Climática y Ecológica”- celebraron el amplio apoyo que tuvo su propuesta. [ACTUALIZADA]
En una nueva semana de trabajo en la Convención Constitucional, el órgano aprobó la propuesta para reconocer que la nueva Constitución «se redacta en un contexto de emergencia climática y ecológica», así como la implementación de «Convencional Constitucional Sustentable».
Esta propuesta fue respaldada por los “eco-constituyentes” apoyada por la firma de 107 convencionales, y se aprobó con 137 votos a favor, 3 en contra y 9 abstenciones.
Su aprobación reconoce que la nueva Constitución se escribe en un contexto de emergencia climática y ecológica, el cual se debe tener presente en cada discusión y en todas las comisiones temáticas de la Convención. Esta eventual aprobación implementa en plenitud la solicitud de una Convención Constitucional Sustentable tomando como base una nueva institucionalidad en el país, enfocada en la reducción de emisiones de CO2 y en consecuencia su huella de carbono.
El documento señala que “la Convención Constitucional, al ser un poder constituyente del Estado, tiene un rol político crucial dentro de esta crisis, por lo cual se insta a declararse en estado de Emergencia Climática y Ecológica y actuar de acuerdo a esto. Entendiendo, que construir las bases y acuerdos para un nuevo pacto social y con la Naturaleza, es el actual desafío y la oportunidad histórica de hacerse cargo de esta realidad para que las sociedades en la Tierra persistan».
Cabe recordar que, a nivel regional, Chile cumple con 7 de los 9 factores de vulnerabilidad definidos por Naciones Unidas a los efectos del cambio climático.
Tras la votación, los conocidos como «eco constituyentes» -grupo de 35 convencionales que se propusieron como objetivo trabajar por una Constitución Socio Ecológica y que, en esa línea, solicitaron al pleno de la Convención Constitucional declararse “en Emergencia Climática y Ecológica”- celebraron el amplio apoyo que tuvo su propuesta.
“Lo que ocurrió hoy quiere decir que en el texto constitucional que empezaremos a escribir se debe tomar en cuenta el contexto que vivimos a nivel global y nacional de emergencia climática y ecológica, por lo cual en cada una de las discusiones de las siete comisiones tienen que estar presentes temáticas como protección de la naturaleza y de las comunidades frente al cambio climático, y las consecuencias respecto a la crisis climática, incluyendo temas como educación, principios de no regresión, principios precautorios, adaptación y mitigación a la crisis climática”, explicó la convencional Cristina Dorador (D3).
La bióloga agregó que, a partir de esta declaración aprobada por el pleno de los convencionales, “el centro de las decisiones debe estar enfocadas en la naturaleza y en la protección de los ecosistemas, y no en el ser humano, como han sido históricamente los procesos constituyentes en Chile”.
Por su parte, el eco-constituyente Juan José Martin (D12) comentó que “hoy fuimos responsables más que nunca y más que muchas otras instituciones públicas en declararnos y reconocer la emergencia climática y ecológica al decir que la Convención, desde hoy, se hace cargo de este tema”.
“Esto no es solo un hito a nivel nacional, sino también internacional e histórico. Por primera vez se va a escribir una Constitución que reconozca el estado de crisis climática y de los ecosistemas a nivel internacional, declarándose oficialmente en emergencia climática y ecológica. Creo que esto habla muy bien de las luchas ambientales y sociales, y del espacio que hemos ganado los eco-constituyentes posicionando estas temáticas. Pienso que es una gran instancia de esperanza para lo que se viene desde este espacio constitucional, pero también para todas las luchas que se dan día a día intentando solucionar este contexto planetario, donde toda la vida esta frágil, está pendiendo de un hilo y atenta a ver qué reacciones toma la humanidad”, destacó.
“Ya no es posible ignorar el momento altamente frágil en que nos encontramos como humanidad”, comentó, por su parte, la convencional Constanza San Juan (D4).
“Somos testigos de un cambio climático provocado por los seres humanos que día a día sigue elevando la temperatura del planeta y que provoca fenómenos extremos que afectan a comunidades, ecosistemas y ciclos vitales. Esto es particularmente evidente en nuestro país, con la sequía que nos afecta. En ese sentido, tenemos la oportunidad de redactar una Constitución que asuma este desafío de manera primordial y que, por ejemplo, proteja sin ambigüedades, los glaciares, que son productores de agua y retardadores por excelencia del cambio climático. En nuestro país, los glaciares aportan hasta el 60% de los caudales fluviales en los valles centrales y establecer un modelo económico que esté limitado por la protección de estos bienes comunes naturales sería una señal muy potente del rumbo que debe tomar la humanidad para salvaguardar el planeta para todos los seres vivientes», afirmó.
Finalmente, el convencional constituyente y representante del pueblo aymara, Luis Jiménez, explicó que «los pueblos originarios somos especialmente vulnerables a los efectos de esta emergencia climática. Desde mediados del siglo pasado se han producido desplazamientos de las comunidades desde sus territorios ancestrales, situación que se ha acrecentado rápidamente en los últimos años debido a la presión de las industrias extractivas. Tal situación compromete el vínculo especial que tenemos con nuestros territorios tradicionales, poniendo en riesgo nuestra propia supervivencia física y espiritual. Por ello, se hacía urgente que la Convención se declare en emergencia ecológica y climática”.
