NUEVA CONSTITUCIÓN
Crédito: Agencia Uno
Según lo exponen en un documento oficial ingresado esta mañana, el actual modelo democrático está basado casi únicamente en la representación, provocando consecuencias negativas, como la abstención electoral, apatía ante los asuntos públicos y el distanciamiento entre la ciudadanía y el ejercicio de la política. “Estas tres consecuencias generales tienen detrás un problema central: la ausencia de participación popular, deliberación y toma de decisión directa”, indica el texto.
Convencionales del colectivo Chile Digno proponen incluir en la nueva Constitución plebiscitos, iniciativas populares de norma, de ley y de reforma constitucional, además de la revocación de mandatos, como una forma de legitimar en el sistema político la participación ciudadana, y así sumar otros mecanismos de democracia directa en la Carta Magna.
La iniciativa cuenta con las firmas de los convencionales Valentina Miranda, Marcos Barraza, Bárbara Sepúlveda, Hugo Gutiérrez, Carolina Videla, Hernán Velázquez, Nicolás Nuñez, Bessy Gallardo, Roberto Celedón e Isabel Godoy.
Según lo exponen en el documento oficial ingresado la mañana de este miércoles, el actual modelo democrático está basado casi únicamente en la representación, provocando consecuencias negativas, como la abstención electoral, apatía ante los asuntos públicos y el distanciamiento entre la ciudadanía y el ejercicio de la política. “Estas tres consecuencias generales tienen detrás un problema central: la ausencia de participación popular, deliberación y toma de decisión directa”, indica el texto.
A juicio de los convencionales, este modelo mantiene en el sistema democrático a grandes mayorías históricamente excluidas, desprovistos de la posibilidad de deliberar y decidir sobre asuntos de su propia vida.
Aseguran que la iniciativa constituyente abrió la oportunidad de una nueva distribución más participativa, en el sistema democrático, con protagonismo popular. Por ejemplo, se propone que todos los ciudadanos queden automáticamente inscritos desde los 16 años, para que puedan sufragar.
“Es clave el paso de una democracia meramente representativa como la chilena a una de carácter participativo”, añaden. Por lo mismo, proponen una serie de cambios en sus diez artículos escritos en esta norma, donde destacan los plebiscitos, las iniciativas populares y la revocación de mandatos.
En relación a los plebiscitos, que pueden ser convocados tanto por el Presidente de la República como por el Congreso o los Pueblos, destacan que la votación popular será para consultar decisiones a la ciudadanía en las que pueda elegir derogar una ley y revocar cargos de elección popular, en los que se incluyen a los elegidos por sufragio universal a nivel nacional, regional, distrital o comunal.
Asimismo, la persona que haya sido invalidada de su cargo, no podrá ejercer cargos públicos ni de elección popular en el plazo de 4 años desde su destitución.
Por otro lado, el proyecto establece el derecho de los ciudadanos de presentar iniciativas populares de ley ante el Congreso, ya sea para la creación de una nueva ley o supresión de alguna que esté vigente. Dichas iniciativas podrán ser presentadas por un grupo de ciudadanos: juntas de vecinos y organizaciones territoriales con o sin personalidad jurídica. Lo mismo corre para las iniciativas populares de reforma constitucional.
Por el contrario, se propone el derecho a solicitar ante el Congreso, en la etapa final de tramitación de un proyecto de ley, que éste no pueda entrar en vigencia por contravenir o perjudicar la soberanía popular.
