¡En la edición del sábado de +Política hablamos del nerviosismo ambiente previo al plebiscito, pero ayer a las seis de la tarde todo estaba claro! Los más contentos: Chile Vamos y La Moneda.
Chile Vamos durmió más tranquilo. Luego de la bomba de racimo que fue la elección de consejeros constitucionales del 7 de mayo, anoche le volvió el alma al cuerpo. Ya están claros los principales culpables de la derrota.
Después de la tormenta. El Frente Amplio quedó muy debilitado luego de la serie de malas noticias de la semana pasada. Socialismo Democrático aparece con un rol protagónico ante los próximos dos años del Presidente Boric.
En el bonus track de este edición especial: le preguntamos a Jorge Fábrega, director de Datavoz, cómo salieron paradas las encuestas después de este proceso eleccionario.
Dormir más tranquilo. Con esta frase me explicaron varios dirigentes de Chile Vamos el efecto que tuvo el resultado del plebiscito de ayer domingo. Después de la traumática derrota de la elección de consejeros constitucionales, el 7 de mayo de este año, ayer en la noche la derecha tradicional retornó a sus cuarteles con la sensación de haberle vuelto el alma al cuerpo.
Los “lujitos” de los republicanos. En el primer proceso constitucional, varios miembros de la ex Concertación criticaron los “lujitos” que se había dado la izquierda al eliminar en la anterior propuesta el Poder Judicial, incluir la plurinacionalidad, terminar con el Senado, entre otros. En este caso, los miembros de la derecha tradicional también tienen su lista de “lujitos” de los republicanos, donde destacan la discusión del “quien” –que ponía en entredicho el aborto en tres causales– y el fin de las contribuciones, entre otros.
Temas pendientes. En las próximas semanas se verá el efecto que tuvo para Evelyn Matthei haberse jugado por el “A favor”, en circunstancias que el texto no la convencía. En el círculo de la alcaldesa señalan que en su desempeño mostró su lealtad con el sector y una gran capacidad de liderazgo, algo que no ocurrió con José Antonio Kast, quien optó por no aparecer públicamente. Pendientes quedan las negociaciones para las elecciones municipales de octubre, la antesala de las presidenciales.
Magistral puesta en escena. Hay que decir que el ambiente ayer en el Partido Republicano no era de derrota, por el contrario –y como era de esperarse–, todos los discursos insistieron en que el gran logro de ellos fue lograr comprometer al Gobierno y todos los partidos políticos en la decisión de que el proceso constitucional no seguía. La dirigencia y encargados del evento tuvieron éxito en quitarle el sabor amargo a la derrota.
Los que no pudieron subirse al discurso optimista. Los únicos que nunca pudieron cambiar la cara o disimular su molestia fueron los consejeros republicanos, especialmente la expresidenta del Consejo Constitucional, Beatriz Hevia, además del único representante del partido en la Comisión Experta, Carlos Frontaura.
Rostros de un fracaso. Están por verse las consecuencias que la derrota tendrá en Carlos Frontaura, Beatriz Hevia y Luis Silva. En el caso de la Convención Constitucional, la derrota tuvo serias consecuencias para personajes como su expresidenta, Elisa Loncon, el exvicepresidente Jaime Bassa y el rostro clave de dicho órgano, Fernando Atria.
Cambio de gabinete. En los últimos días ha habido rumores de posible cambio de gabinete después del plebiscito. El presidente de RN, Rodrigo Galilea, aprovechó ayer de hacer un llamado al Mandatario para que cambie a algunos de sus ministros. Sin embargo, en este caso la situación es difícil y me dicen que es principalmente por la falta de rostros en el Frente Amplio para entrar al Gobierno.
Tabla de salvación. En el Socialismo Democrático está instalado que son sus ministros los que tienen el gran peso de esta administración y existe molestia por la falta de protagonismo y ausencia de costos políticos que paga el Frente Amplio por sus errores.
Economía y Seguridad. El rol del ministro de Hacienda, Mario Marcel, en la reactivación de la economía y en la discusión del pacto fiscal, y el papel de la ministra del Interior, Carolina Tohá, en la agenda de seguridad, garantizan al Socialismo Democrático protagonismo en el Gobierno. La ausencia del Frente Amplio será para largo.
Qué pasó con las encuestas. Jorge Fábrega, socio director en Tendencias Sociales de Datavoz, economista y sociólogo (PUC), además de académico en el Centro de Investigación en Complejidad Social de la Universidad del Desarrollo, en esta entrevista explica cómo se comportaron las encuestas.
-Un hecho concreto es que las encuestas de empresas con metodologías reconocidas y que reportan sus hallazgos de manera regular (como Activa Research, Cadem, Panel Ciudadano) mostraron resultados en línea con la votación. Por otro lado, aquellas con enfoques no convencionales o menos transparentes (por ejemplo, AtlasIntel, Partner y Ananda) presentaron discrepancias tanto en términos cuantitativos como cualitativos. Para establecer con certeza si estas diferencias se deben a las metodologías empleadas o si son resultado de variaciones aleatorias, se necesitarán más datos de futuras votaciones y sondeos. No obstante, estos resultados sirven como un punto de partida interesante para las empresas que utilizan métodos tradicionales de encuestas.
-Existe una ligera diferencia entre el total de votantes en las elecciones de mayo pasado, que fue de 12,8 millones, y los 13 millones de ayer. Por consiguiente, cualquier impacto del voto obligatorio no se manifiesta en el volumen de la votación, sino en la distribución de los votos entre las distintas opciones. Investigaciones previas a la elección revelaron que individuos que usualmente no votan tienden a inclinarse hacia posiciones más conservadoras en comparación con el votante promedio. Esto indica que el voto obligatorio podría beneficiar más a la opción “A favor”. Sin embargo, este factor por sí solo no parece ser determinante en el resultado de la elección.
-El mensaje clave que la ciudadanía transmite, tras cuatro años del proceso constituyente, se divide en dos aspectos fundamentales. En primer lugar, no anhela, de la política, ni transformaciones drásticas ni estancamiento; busca el equilibrio lejos de los extremos. En segundo lugar, existe un claro descontento con el establishment y una tendencia a continuar rechazando propuestas políticas hasta que no se aborden y resuelvan asuntos prácticos de interés inmediato de la población.
Y hasta aquí este Especial Plebiscito de +Política, el newsletter de El Mostrador que permite conocer y entender mejor lo que ocurre en los pasillos del poder. Si tienen algún comentario, duda o información que quieran compartir, pueden escribirme a jmontalva@elmostrador.cl.