Cada 27 de septiembre se conmemora el Día Internacional del Turismo, que promueve la concientización sobre el valor social, cultural, político y económico, además de cómo este contribuye al desarrollo de la sociedad.
El intercambio cultural y emoción que se vive en cada viaje, transforman cada experiencia en una historia única para cada persona que cruza su frontera o incluso su ciudad. Sin embargo, los nervios y ansias de camino al aeropuerto para tomar el avión, o los viajes eternos de carretera, se vieron pausados por la pandemia que vivimos.
El sector del turísmo fue uno de los más afectados por las cuarentenas de las cuales todos tenemos una historia que contar. Viajes postergados, cancelados, planes de meses fueron reemplazados por una estadía que parecía no tener fin en casa. Luego de meses de incertidumbre, en nuestro país llega algo de esperanza para volver a una normalidad que parecía cercana gracias a las vacunas. Pero era sólo el primer paso de unos cuántos más que se necesitaban para salir a las calles, porque viajar era un poco más complicado.
Después de una serie de medidas, planes y protocolos, el Pase de movilidad se ha transformado en un nuevo tipo de pasaporte que permite la entrada a la gran mayoría de lugares e incluso el poder viajar al extranjero con menos restricciones.
El Pase de movilidad dejará de estar vigente desde el 1 de octubre. Sin embargo, al momento de viajar es necesario contar con el carnet de vacunación. El turismo en Chile se encuentra camino a una recuperación económica gracias a los cambios en las exigencias sanitarias, abriendo aún más la posibilidad de recibir visitantes.
Según la Subsecretaria de Turismo, Verónica Kunze, se estima que la entrada de turistas extranjeros sería aproximadamente entre 760 mil a 1.9 millones de personas en los meses restantes del año. Lo que es significativo para la reactivación de la industria y su economía.
De acuerdo al último informe de la Junta Aeronáutica Civil, las estadísticas de viaje nacional e internacional han aumentado considerablemente en comparación al año anterior. Hasta agosto del presente año se registraron más de 13 millones de vuelos nacionales e internacionales, lo que representa un crecimiento del 131,6% que el mismo periodo en 2021. Lo anterior refleja que las ganas de salir a disfrutar de días libres nunca se fueron y las exigencias sanitarias hacen cada vez más fácil el poder lograrlo.
Aunque existan ganas, nos encontramos viviendo una inflación que se ha transformado en más que un dolor de cabeza para algunos. Pero pese a que ha interferido en los planes de viaje con ciertos reajustes de presupuesto, no los ha frenado del todo.
Las cifras hablan por sí solas y el internet ha hecho de las suyas con influencers compartiendo tips para ahorrar, cómo encontrar viajes económicos, destinos imperdibles e incluso libros sobre tendencias del sector. Además de las expectativas que genera cada Cyber para poder hacer realidad las vacaciones soñadas.
A estas ganas por viajar y el aumento considerable de venta de pasajes se considera un fenómeno que se veía venir y se denomina “Turismo de Venganza”. Este es “una reacción a la imposibilidad de tomar vacaciones con normalidad. Responde a la condición humana y es habitual después de una crisis como la vivida”, explica Francesc González, profesor de los Estudios de Economía y Empresa y director del grado de Turismo en la Universitat Oberta de Catalunya” (Reason Why, Julio 2022).
Vemos entonces que la pausa a los viajes sólo fue para reunir nuevos destinos por descubrir, más disposición a disfrutar y no pensar en el futuro cuando se trata de salir a conocer el mundo, porque de lo único que sabemos es que mañana todo es incierto.