Animales
La gripe aviar llegó a Chile a fines de 2022 afectando a pelícanos, gaviotas, pingüinos y otros animales. Sólo en el primer trimestre de 2023, más de 700 animales marinos muertos se encontraron en las costas, entre las regiones de Arica y Coquimbo. ¿Cuál es el riesgo humano, cuántas personas se contagiaron y cuáles son las proyecciones en adelante?
“La enfermedad denominada influenza aviar de alta patogenicidad (IAAP), conocida como gripe aviar, se atribuye a las aves silvestres, que son el reservorio natural del virus: las aves migran en diversas temporadas desde el hemisferio norte al sur y ahí se producen los contagios”, explicó la directora nacional del Servicio Nacional de Pesca y Acuicultura (Sernapesaca), Soledad Tapia Almonacid.
El virus de gripe aviar (H5N1) es de linaje euroasiático, fue detectado en 2021 y llegó al país a fines de 2022. Los primeros casos afectaron aves como pelícanos, gaviotas y pingüinos, pero se extendió a otros animales.
Según el último reporte de Sernapesca, en el primer trimestre de 2023 se reportaron hasta ahora 532 lobos marinos, 234 Pingüinos de Humboldt y 6 chungungos muertos en las costas de la macrozona norte, siendo las principales regiones afectadas Arica y Parinacota; con 292 lobos marinos muertos; y Atacama con 139 Pingüinos de Humboldt fallecidos.
La cifra supera en un 482,4% al total de varamientos, correspondientes a estas especies, reportados en 2022.
“Durante estos tres meses del año registramos una cifra histórica de animales marinos varados muertos, lo que da cuenta de que claramente estamos frente a una situación anómala, que atribuimos al fenómeno de la Influenza Aviar Altamente Patógena (IAAP), especialmente porque los varamientos de estos meses se concentran en la zona norte”, indicó a El Mostrador.
A la fecha, se contabiliza un total de 13 ejemplares de animales marinos confirmados como positivos para IAAP, correspondientes a un chungungo en la región de Arica; ocho lobos marinos, dos en la Región de Arica, tres en Tarapacá, dos en Antofagasta y uno en Coquimbo; y cuatro Pingüinos de Humboldt, uno en Tarapacá, dos en Antofagasta y uno en Coquimbo. Esto de un total de 183 ejemplares muestreados por Sernapesca.
-¿Qué se puede decir sobre el riesgo humano? ¿Se reportaron casos?
-De acuerdo a lo diferentes reportes internacionales, si bien existe un riesgo de contagio para el ser humano, la tasa de contagio registrada es muy baja, por ejemplo la OMS ha informado el 2022 de 4 casos en personas, pero al existir el riesgo, aunque sea bajo, debemos resguardar la salud de las personas.
Hasta la fecha, el Ministerio de Salud no ha reportado contagios en la población en nuestro país, y la OMS reporta a nivel mundial, desde el año 2003 a enero de 2023, 868 casos de influenza aviar en personas, existiendo solo cuatro casos el último año (2022) en China, España y Estados Unidos.
-A partir de estas cifras: ¿Qué proyecciones tienen en relación a la expansión de la enfermedad para este año?
-En estos casos, siempre debemos proyectar posibles escenarios y dado lo ocurrido en Perú, y el aumento significativo que hemos tenido de varamientos en animales marinos de más de un 482% en relación al año 2022, lo más probable es que siga en aumento, pero a su vez esperamos se estabilice en un par de meses, con la llegada de temperaturas más bajas y de la disminución de migraciones en aves.
Cabe señalar, que siempre es complejo hacer una predicción sobre el impacto de influenza aviar altamente patógena en poblaciones de mamíferos marinos, pero hay elementos clave que deben determinarse, por ejemplo si el virus seguirá circulando en poblaciones de aves silvestres en chile y por cuánto tiempo, también si existen mutaciones del virus que le permitan transmitirse entre mamíferos marinos, respuesta que puede empezar a aclararse a través del estudio genético del virus, análisis que hoy se encuentran en desarrollo producto de una colaboración con la facultad de medicina veterinaria de la Universidad de Chile.
La situación es similar en otros puntos del cono sur. De acuerdo a la información brindada por la directora de Sernapesca, en Perú hubo un fuerte desarrollo del virus, donde el Servicio Nacional de Áreas Naturales Protegidas por el Estado (Sernanp) reportó más de 63 mil aves y 3.487 lobos a marzo de este año.
En Argentina, en tanto, alertaron del virus mediante el Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa) el 15 de febrero en gansos andinos, hallados en la provincia de Jujuy y desde ahí contabilizan 40 brotes, según la institución que lleva estos temas.
“Es importante mencionar, que el virus puede afectar además de las aves silvestres y de corral, a mamíferos marinos, como lobos marinos, cetáceos, chungungos, y también al ser humano”, remarcó Soledad Tapia Almonacid.
El virus se encuentra y transmite por compartir hábitats, a través de secreciones, excrementos, o fluidos corporales de aves contaminadas con el virus. Por este motivo, desde la institución llamaron a la tranquilidad, pues “toda la institucionalidad” trabaja coordinada ante la emergencia.
“Estamos coordinados con las delegaciones presidenciales, los gobiernos regionales y municipios, las Seremias de Salud, SAG y Senapred, donde contamos con equipos de profesionales que realizan una vigilancia activa para la detección temprana de nuevos casos”, subrayó.
Por otro lado, el servicio reiteró el llamado a “no tocar, ni manipular, mantener la distancia y reportar” en caso de detectar un animal muerto o que presente síntomas como decaimiento, tos, dificultades respiratorias o espasmos musculares.
“Esto incluye no trasladarlos, no devolverlos al mar ni enterrarlos en playas por cuenta propia”, puntualizó la directora de Sernapesca, quien por último señaló que se está priorizando asistencia de animales con sintomatología asociada a IAAP ya que los municipios deben encargarse de la disposición de animales muertos.
