Un 11% de las personas encuestadas no consume carne animal mientras que el 50% de los jóvenes ha cuestionado su consumo.
Este mes la ONG Veganuay reveló los resultados de su estudio de percepción* -realizado por Criteria- que comparó la carne de origen animal y la alimentación basada en plantas. El estudio de demuestra que un 45% de los encuestados y encuestadas considera que la comida en base a plantas es más sustentable de cara al futuro, versus un 15% que asigna ese atributo solo a la carne de origen animal. Un 40% cree que ambas lo son por igual.
Así también, un 44% cree que la comida en base a plantas es más consciente con el entorno natural, y un pequeño 16% que cree que solo la carne de origen animal tiene esta característica. El 40% restante cree que las dos lo son por igual.
“Estos resultados demuestran como la sociedad chilena, en gran número, está cuestionándose el consumo de carne y muchas de ellas, están viendo lo positivo que tiene para el planeta los productos en base a plantas, tanto para nuestro entorno natural como para un futuro más sustentable”, declaró Mauricio Serrano, director de VeganuaryLatinoamérica.
Otro dato interesante, es que un 11% de la población no consume carne. Si se analiza por rango etario, este porcentaje aumenta a 18%. Así, quienes tienen entre 18 y 29 años, resultan ser quienes más han eliminado la carne de su alimentación.
Junto con ello, un 35% de la población se ha cuestionado alguna vez el consumo de carne animal. Nuevamente, en el rango etario que va entre los 18 y los 29 años se evidencian mayores diferencias, ya que la mitad (50%) de las y los jóvenes encuestados ha cuestionado el consumo de carne.
Los efectos de la industria de la carne en el medioambiente
La ganadería es la principal causa de deforestación, ¿realmente vale la pena pagar ese precio por comer un trozo de carne? Este es uno de los puntos que Veganuary plantea en su próxima campaña Enero Vegano 2025, y que se relacionan directamente con los resultados del estudio sobre la percepción de la alimentación en torno al medioambiente.
Según análisis (en base a calculadoras que miden el impacto medioambiental de la alimentación), por cada millón de participantes que adoptan una alimentación basada en plantas durante un mes, se ahorran 6,2 millones de litros de agua, se salvan 3,4 millones de animales y se ahorran más de 103 mil toneladas de CO2eq equivalente a más de 253 mil vuelos de Santiago de Chile a Río de Janeiro en Brasil.