Mascotas
La alimentación de nuestras mascotas es también un factor importante en cuanto a la preocupación de sus tutores, por lo que es fundamental conocer qué cosas no pueden ingerir y, a su vez, qué medidas tomar en caso de que consuman alguno de estos alimentos prohibidos.
Antiguamente, los más regalones de la casa comían de lo que sus cuidadores comían, pero eso ha ido cambiando radicalmente con el paso de los años. Actualmente, existe una variedad muy amplia de alimentos que están diseñados para cada una de las necesidades de los canes y consentidos del hogar.
La académica de la Escuela de Medicina Veterinaria de la Universidad de Las Américas (UDLA), Karen Inger Fehrmann Cartes, comenta que “muchos de los alimentos que consumimos en casa pueden presentar un peligro para nuestras mascotas. Algunos pueden parecer inocuos, como por ejemplo: leche de vaca, que posee lactosa, generando cuadros digestivos, al ser los perros adultos incapaces de digerirla de manera adecuada. Otros alimentos, como jamón, salame, embutidos en general, pueden ocasionar diarreas y vómitos al ser altos en sodio, compuestos como colorantes y condimentos”.
Por otro lado, la especialista comenta que aparte de los alimentos ya mencionados, hay otros tantos que pueden ser igual de peligrosos y que son prohibidos para las mascotas. Entre ellos se encuentra la cebolla, chocolate, berenjenas, café, sal, huesos, uvas, nueces de macadamia, canela y los cuescos de frutas.
Fehrmann Cartes comenta que en caso de intoxicación “nunca es recomendado auto medicar a la mascota, ni inducir el vómito, ya que no todas las sustancias tóxicas son ingeridas por vía oral y, en algunos casos, puede empeorar el cuadro”. Y añade que “si la intoxicación fue por contacto directo con la piel, entonces se puede lavar la zona con jabón y agua hasta que quede limpia de la sustancia. Lo más importante es llevarlo rápidamente a una clínica veterinaria para su correcta evaluación”.
La especialista en medicina veterinaria comenta que “la intoxicación en mascotas puede manifestarse de diversas maneras, y los síntomas pueden variar según la sustancia ingerida. Algunos signos comunes de intoxicación en mascotas son: vómitos, diarrea (presencia de sangre), salivación excesiva, letargo y debilidad (desorientación), dificultad para respirar, convulsiones o temblores en extremidades (descoordinación al caminar)”.
Karen Fehrmann comenta que “algunas razas presentan ciertas predisposiciones que las pueden hacer más vulnerables a intoxicaciones, por ejemplo, perros de razas pequeñas son más vulnerables ya que, debido a su tamaño corporal, pequeñas cantidades de sustancias tóxicas pueden generar rápidamente una intoxicación. Perros braquicéfalos presentan rápidamente dificultades respiratorias que dificultan el tratamiento y algunas razas tienen predisposición genética a sufrir intoxicaciones, como los perros raza collie/pasto inglés/ovejeros que, por una mutación en un gen, los hace susceptibles a intoxicaciones con antiparasitarios en base a ivermectina, causándoles daño a nivel neurológico”. A su vez, manifiesta que “los gatos también presentan una gran sensibilidad a los lirios, si los consumen puede ocasionarles un fallo renal agudo”.
Finalmente, la profesional de medicina veterinaria de la UDLA enfatiza que “las intoxicaciones alimentarias en mascotas pueden transformarse rápidamente en emergencias médicas. Esto varía según la sustancia ingerida, en qué cantidad, el estado de salud general del animal y cuánto tiempo ha pasado desde la ingesta, ya que eso influye directamente en la absorción de las toxinas”. Es categórica en que “es muy importante dar la mayor cantidad de información al médico tratante para poder determinar la causa de intoxicación y hacer el tratamiento correspondiente según cada caso”.
Ante cualquier sospecha de intoxicación por alimentos en mascotas, es importante y fundamental buscar asistencia veterinaria de manera inmediata, evitar, por supuesto, la automedicación para así poder garantizar una buena atención médica y, a su vez, una pronta recuperación en los más regalones de la casa.
