Especialista entrega sugerencias para que nuestros animales de compañía se ajusten al cambio que requiere este periodo del año.
Es un hecho observado que muchas mascotas, con el retorno a la vida post vacaciones de su familia humana, experimentan ansiedad al verse enfrentados a pasar varias horas al día sin compañía, e incluso, pueden llegar a presentar un trastorno conductual denominado ansiedad por separación, que se manifiesta con signos como vocalizaciones excesivas (gemidos, aullidos y ladridos) y eliminación de orina y/o heces en lugares inapropiados, entre otros.
La Subdirectora de la Escuela de Ciencias Agroalimentarias, Animales y Ambientales (ECA3) de la Universidad de O’Higgins (UOH), María José Ubilla, explica que para ayudar a los animales a adaptarse a las nuevas rutinas es recomendable “sacarlos de paseo por las mañanas, dejarles juguetes dispensadores de comida, utilizar feromona sintética de apaciguamiento y realizar las llamadas salidas ‘falsas’ de corta duración -varias veces al día- lo que provocará una habituación a quedarse solos por período de tiempos más prolongados”.
Asimismo, las y los tutores deben observar a sus mascotas, explica Ubilla, y detalla que “si evidencian cambios conductuales como inapetencia, vocalizaciones excesivas, orinar y/o defecar en lugares inapropiados o romper objetos o muebles, consulten con su médico/a veterinario/a de cabecera o bien con un/a etólogo/a clínico/a (experto en comportamiento animal)”.
Lo mismo aplica para signos relacionados con ansiedad, como “estado de hipervigilancia (duerme y descansa menos de lo habitual), demandas de atención constantes en presencia de sus tutores o si aparecen signos de agresividad, cuando los tutores abandonan el domicilio”, detalla.
Asimismo, especifica que “ante estos signos no se debe castigar al animal, dado que el castigo provocará aún más ansiedad”.
Junto a estas observaciones, se debe optar por ofrecerles alimentos antes de salir y también es recomendable “utilizar juguetes dispensadores de comida, que cumplen la función de desviar la atención de la mascota del estímulo que le genera ansiedad: la ausencia de los tutores, y dirigirla a un objeto que le genera entretención”.
En ese sentido, la experta llama a estar alerta y acudir a una especialista si es necesario.