En Poculón, Teodoro Schmidt, Carmen Gloria Cañete y su familia han transformado Rancho JYC en un refugio rural que encanta a turistas de todo el mundo. Gracias a la conectividad satelital, hoy combinan tradición, naturaleza y tecnología para ofrecer una experiencia auténtica en el sur.
Teodoro Schmidt, en la Región de La Araucanía, es hogar de Carmen Gloria Cañete y su familia, quienes han dedicado los últimos 13 años a levantar un emprendimiento de agroturismo llamado “Rancho JyC”. Este negocio familiar ha florecido como un refugio para quienes buscan desconectarse de la vida urbana y sumergirse en las tradiciones del sur de Chile.
Rodeado de naturaleza nativa, este negocio es un espacio donde la tranquilidad y el encanto del campo se fusionan. Desde los amaneceres con vistas despejadas hasta el susurro del estero que atraviesa sus tierras, cada rincón invita a reconectar con lo esencial. Se trata de una experiencia local donde realmente se vive de primera mano lo que significa el sur del país.
Carmen Gloria y su esposo Juan se sienten orgullosos de haber sido pioneros en el agroturismo en la zona de Poculón. En un lugar donde las innovaciones llegan poco a poco, ellos han trabajado arduamente para mostrar su estilo de vida y la riqueza de su territorio. Y esto es precisamente lo que a ojos de la familia Cañete, buscan los turistas más alejados de nuestro país, como los europeos.
“A los visitantes de Europa les encanta la idea de estar en un lugar apartado, rodeado de naturaleza y con la oportunidad de experimentar la vida rural chilena”, comenta Carmen Gloria, quien agrega que se trata de turistas que valoran especialmente las actividades personalizadas y el hecho de insertarse en las tradiciones, lo que también pueden experimentar a través de la gastronomía.
Sin embargo, a la hora de promocionar el “Rancho JYC” y llegar a una mayor cantidad de turistas en el mundo, Carmen Gloria y su familia enfrentaban una gran barrera: la falta de conectividad. “Para cualquier negocio el uso de Internet se ha vuelto primordial y lo mismo pasa con uno turístico, que necesita de respuestas rápidas y visibilidad. Donde nos
encontramos no hay conectividad y para responder correos y mantener contacto con los clientes, tenía que recorrer 8 kilómetros hasta el pueblo”, explica Carmen Gloria. Mientras buscaba alternativas que le permitieran impulsar su negocio, se enteró de
Conectando Sueños Turismo, programa impulsado por Hughes y Transforma Turismo con el apoyo de Indap y Achitur, que busca entregar conectividad satelital a negocios turísticos liderados por mujeres. No dudó en postular, era la oportunidad de contar con la herramienta que le permitiría hacer diferentes mejoras en pos de contar con un negocio más completo.
“Gracias a esta conexión ahora puedo utilizar de manera más eficiente las redes sociales, lo que nos permite llegar a una mayor cantidad de público; pero también lo veo como una forma de mejorar nuestras reservas ya que puedo responder consultas inmediatamente. Además, permite considerar nuevos métodos de pago, como el uso de tarjetas, y la posibilidad de brindar un servicio completo a nuestros huéspedes”, detalló Carmen Gloria.
En este sentido, Ana Duque, gerente de marketing de Hughes, destacó la importancia de llevar conectividad a zonas rurales. “Nuestro objetivo con Conectando Sueños es apoyar a emprendedores como Carmen Gloria, quienes, a pesar de estar en lugares alejados, tienen un gran potencial para crecer y conectar con el mundo. La tecnología satelital no solo transforma negocios, sino que también impulsa el desarrollo de comunidades completas”, comentó.
Hoy en día, la conectividad se ha convertido en una herramienta esencial para diversas industrias, y el turismo no es la excepción. La experiencia de Carmen Gloria demuestra cómo el acceso a tecnologías como el internet satelital puede transformar un negocio,
permitiendo a los emprendedores rurales alcanzar nuevos mercados, mejorar la atención a sus clientes y potenciar el desarrollo de sus comunidades. Hoy la conectividad representa una gran puerta, una que en este caso permite dar a conocer un pedacito del sur del país al resto del mundo.