La Candelaria: una mágica festividad peruana para descubrir este 2025
Si planeas visitar el sur de Perú en febrero, puedes llegar has Puno a vivir una experiencia inolvidable en una de las celebraciones más emblemáticas del país andino. La celebración religiosa incluye un amplio despliegue de danzantes, folklore y misticismo.
Además de ser el hogar del imponente lago Titicaca, Puno es también una ciudad llena de misticismo e historia milenaria que, cada febrero, se transforma en un escenario de color, música y devoción con la Festividad de la Virgen de la Candelaria, que reúne a turistas de todo el mundo que buscan conocer y ser parte de una de las celebraciones religiosas más importantes de Sudamérica.
La Festividad de la Virgen de la Candelaria se caracteriza por ser una gran fiesta con danzas, concursos, pasacalles, mucho color y fervor religioso en la que participan unos 40 000 danzantes y 200 bandas musicales. Se remonta a la época colonial, y tiene como raíces las tradiciones católicas y elementos simbólicos de la cosmovisión andina. Por su importancia cultural y religiosa en el 2014 fue declarada Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad por la Unesco.
Las celebraciones se extienden durante dos semanas, en las que miles de danzantes salen a las calles vestidos con prendas típicas con mucho color, brillos y finos bordados, y unas llamativas botas con cascabeles que suenan a cada paso. Ellos, con su ritmo contagiante y alegría desbordante, bailan por horas en honor a la virgen y se ganan los aplausos de la multitud que admira sus incansables pasos de baile.
El 2 de febrero, todos se reúnen en el atrio de la Iglesia de San Juan Bautista, donde se lleva a cabo la tradicional procesión de la imagen de la virgen por las principales calles de la ciudad, acompañada de música, danzas y una emotiva participación de las familias, quienes entregan oraciones y peticiones.
Uno de los momentos más esperados son los dos grandes concursos de danzas autóctonas y el de trajes de luces, que tienen lugar en un estadio de la zona y que son transmitidos a nivel nacional. Además, el tradicional pasacalle reúne a cerca de 200 conjuntos folclóricos, en el que participan comunidades quechuas y aimaras de toda la región.
Es así que Puno se convierte en el escenario de la festividad más grande de Perú en la que la Virgen de la Candelaria, patrona de Puno, es venerada por los habitantes de la región, quienes año tras año renuevan su fe y celebran su identidad cultural.
Los tesoros de Puno
Puno es una región que destaca además por el Titicaca, el lago navegable más alto del mundo (3910 m. s. n. m.). Ahí podrás conocer las impresionantes islas flotantes como la de los Uros, una población que ha construido sus casas y embarcaciones con totora, una planta acuática de la zona; Taquile, una isla con vistas extraordinarias del lago y cuyo arte textil fue declarado Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad; y la isla de Amantaní, una de las más extensas del Titicaca, donde puedes vivir la fabulosa experiencia del turismo comunitario que permitirá conocer las costumbres y tradiciones de sus pobladores.
Además, el Centro Histórico cuenta con la Plaza de Armas, que es el corazón de la ciudad. Está rodeada de edificios históricos como su hermosa catedral de estilo barroco mestizo, que los hace un emblema arquitectónico de la ciudad. También el Arco Deustua es un importante monumento histórico que ofrece una vista panorámica de la ciudad.
Y si se trata de vistas imperdibles está el Mirador del Puma Uta, un lugar para disfrutar del paisaje del lago y la ciudad, con una enorme estatua de un puma. A su vez Kuntur Wasi (Casa del Cóndor) es otro mirador desde donde se puede apreciar la belleza de Puno y el lago.
En cuanto a complejos arqueológicos, Sillustani es un sitio arqueológico ubicado cerca del lago Umayo, famoso por sus chullpas, torres funerarias preincaicas e incaicas. También Cutimbo cuenta con chullpas y petroglifos.
Además de ser conocida como la “Capital Folclórica de Perú”, Puno ofrece una gran variedad de atractivos turísticos culturales, históricos, naturales y de arqueología, que lo hacen un destino imperdible en Perú