Atacama se consolida como destino clave para el turismo deportivo y de aventura en Chile

La región de Atacama no solo es visitada para un tipo de turismo, sino que ahora se han abierto más posibilidades de explorar y conocer este lugar desde la perspectiva de un turismo deportivo.

Durante los últimos años, este tipo de turismo ha sido un fenómeno que ha ido en aumento, impulsado, principalmente, por el creciente interés de realizar actividades al aire libre y explorar los paisajes extremos que ofrece el norte de Chile.

Esta región, conocida por su desierto árido, paisajes lunares, montañas y cielos despejados, se ha convertido en un destino privilegiado para quienes buscan combinar aventura, deporte y naturaleza.

En esta región se pueden vivir experiencias únicas en cuanto al turismo deportivo y de aventura. Si visitas la región de Atacama podrás ver especies como el ingüino de Humboldt, bucear con ballenas, surfear las dunas más altas de Chile y probar las delicias del mar. 

Campos Dunares de Copiapó: la adrenalina de surfear la arena 

El Mar de Dunas, uno de los campos lunares más vastos de Chile, se extiende a lo largo de 335 kilómetros cuadrados de arena, convirtiéndolo en el destino ideal para los amantes del turismo deportivo.

La oferta de servicios incluye recorridos en vehículos 4×4 y caminatas por los extensos cerros de arena que dibujan sombras al atardecer. En este lugar se encuentra la Mina San José, lugar donde estuvieron atrapados 33 mineros bajo más de 700 metros por 69 días. 

El sandbar es una de las actividades que se pueden realizar en las dunas del desierto, especialmente por El Medanoso, la duna más grande de nuestro país. Este es un cerro de roca cubierto de arena que se eleva a más de 500 metros de altura sobre los Llanos de Llampo, alcanzando unos 1660 metros sobre el nivel del mar.

Gentileza Chile es Tuyo.

Buceo con ballenas y avistamiento de pingüinos 

Chañaral de Aceituno es reconocido por ser uno de los mejores lugares de Chile para el avistamiento de cetáceos entre noviembre y mayo. Este es un atractivo que reúne tanto a turistas, fotógrafos como científicos de todo el mundo para conocer la única y asombrosa fauna marina.

A 130 kilómetros de Vallenar, se encuentra la Reserva Nacional Pingüino Humboldt, la que permite la observación de los pingüinos y la oportunidad de vivir una de las experiencias de turismo aventura más espectaculares de la región: bucear con ballenas.

Esta reserva marina y terreste está formada por la Isla Chañaral, Isla Choros e Isla Damas. Posee la colonia reproductiva del pingüino de Humboldt más numerosa del mundo con cerca de 24 mil aves. Durante la primavera, los pingüinos se escondes entre las raíces de los cactus, alternando sus salidas al mar en busca de alimentos.

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En este lugar, además, se juntas varias corrientes marinas, lo que ayuda a que las rocas se llenen de vida con esponjas, actinias y parazoanthus, esto permitirá bucear entre paredes de roca. Dentro de las especies de fauna marina que se pueden observar están los cardúmenes de castañeta o pejeperros. Si te animales a bucear, quizás incluso tengas la fortuna de nadar cerca de una ballena blanca, azul o jorobada.

Caleta Chañaral: paseos náuticos y gastronomía local

La Caleta Chañaral de Aceituno se encuentra a unos 10 kilómetros de la Isla de Chañaral. Este fue sitio de permanencia de los Changos, nómadas que construían sus balsas de cuero de lobo marino. Hoy, esta pequeña caleta de pescadores ofrece abundante pesca y diversas actividades turísticas.

En esta caleta podrás realizar diversas actividades de turismo aventura. Desde bucear, paseos náuticos hasta la observación de lobos marinos, delfines y ballenas, son algunas de las actividades que podrás disfrutar.

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