
Alza en el turismo en Chile pone en la lupa la conducta de los visitantes en espacios naturales
El verano recibe miles de turistas, lo que implica cifras positivas para las diversas industrias involucradas, pero que al mismo tiempo puede pesar en el ámbito medioambiental. El llamado a los cientos de visitantes es a realizar un turismo regenerativo.
Según las cifras proyectadas por el Sernatur, tan solo en el turismo interno se registrará un promedio de 25 a 30 millones de viajes durante el 2025 a lo largo del país, en su temporada alta (enero y febrero). Cifra que invita a poner lupa respecto del impacto y gestión del flujo de visitantes, por diversas zonas del país, varias de estas emblemáticas y de alto valor medioambiental.
“Es fundamental que el impacto se reduzca al mínimo y que permita mantener la armonía en los destinos turísticos, los cuales usualmente se concentran en regiones como Valparaíso, La Araucanía y Magallanes, según data de Sernatur. Frente a las nuevas exigencias del entorno natural, debe de aplicarse un turismo regenerativo que busca dar la mano de vuelta a la naturaleza”, comenta Consuelo Romano, directora ejecutiva de Fundación Lepe.
El turismo regenerativo es aquel que promueve una interacción profunda y respetuosa con los destinos visitados por los turistas, potenciando sus economías, comunidades y cultura local, y garantiza la armonía entre la naturaleza y el desarrollo humano. Esto, frente a cifras complejas del impacto negativo del turismo.

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A nivel global, el turismo es responsable de aproximadamente el 5% de las emisiones totales de Gases de Efecto Invernadero (GEI), según establece World Travel & Tourism Council. Así también, se estima que el 86% de las playas chilenas presentan signos de erosión, con retrocesos anuales de hasta 1,5 metros, fenómeno directamente relacionado con el cambio climático y la urbanización excesiva, exacerbados por la alta afluencia turística en temporadas estivales.
“El recorrer de forma regenerativa invita a visitar los diversos ecosistemas habilitados para el turismo, siendo respetuosos y procurando que nuestras acciones apoyen la restauración del entorno natural, así como la recuperación de áreas degradadas participando de instancias de reforestación, promoviendo la conservación de la biodiversidad, a través del respeto de la flora y fauna locales; y la salud ambiental, controlando posibles contaminantes y sus riesgos”, agrega la directora de la fundación.

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Al mismo tiempo, el turismo regenerativo quiere involucrar a las comunidades locales en actividades turísticas, que fortalezcan la identidad cultural y genere oportunidades económicas sostenibles para los habitantes. En la actualidad, son pocos los proyectos que invitan a un turismo que regenera ecosistemas, algunos ejemplos son Ruta de los Abastos, en la región de O’Higgins, y la Ruta de los Parques de la Patagonia. Así también el programa Vivo Curimón, en el Valle del Aconcagua.
“En la localidad de Curimón se encuentra el Parque Natural Cerro San Francisco, un cerro isla que permite la observación del paisaje en 360º, con miradores naturales y un sendero educativo habilitado con paneles interpretativos, audioguías y material para el reconocimiento de flora nativa. Este espacio, además de ser reconocido como un atractivo turístico y patrimonio biocultural de la localidad del valle, también es el lugar donde se desarrollan técnicas de regeneración ecológica”, explicó Dazma Guzmán, coordinadora del Programa Vivo Curimón.
A ello, añadió que “hasta el momento se han plantado con la comunidad, de forma voluntaria, más de 500 árboles y arbustos nativos, además de obras de conservación de agua y suelo. Con acciones como estas, la fundación incentiva la visita a espacios naturales de forma consciente, entregando información a los visitantes y dándoles espacios para retribuir a la naturaleza y la comunidad local”.
De esta forma, y frente a las proyecciones al alza de viajes a nivel nacional, es posible atraer mayor cantidad de visitantes interesados en experiencias auténticas y sostenibles, fomentando un turismo más responsable. Al mismo tiempo que se incrementa la participación pública y privada para el desarrollo de este tipo de proyectos a lo largo del país.
¿Cómo pueden los turistas recorrer de forma regenerativa?
A continuación, dejamos tips para recorrer el país de forma responsable y empática, no sólo en la fecha estival, sino durante todo el año:
- Preferir alojamientos con prácticas sostenibles (uso de energías limpias, reciclaje, etc.)
- Respetar senderos y normativas en parques nacionales para evitar la erosión del suelo y proteger la flora y fauna.
- Participar en actividades como reforestaciones, limpieza de playas o restauración de ecosistemas.
- Consumir productos y servicios de comunidades de la zona para fortalecer su economía.