Científicos y académicos están abandonando X, antes Twitter, debido a la falta de control sobre desinformación y contenido inapropiado. Bluesky, creada por Jack Dorsey, se posiciona como un espacio más seguro y regulado, con herramientas de moderación y privacidad destacadas.
Twitter, ahora conocida como X luego de que Elon Musk la comprara en 2022, era un espacio usado por millones de usuarios, pero también por científicos y académicos que compartían sus investigaciones, tesis y hallazgos. Este escenario ha cambiado debido a las restricciones, contenidos y publicidad que existen actualmente en X. Es debido a esto que los profesionales están abandonado la plataforma.
Según la revista Nature, la falta de control sobre noticias falsas, desinformación, bots y contenido inapropiado ha generado un abandono ante la pérdida de confianza en una de las redes sociales más populares de los últimos años.
El crecimiento de Bluesky, red social creada por el cofundador de Twitter, Jack Dorsey, ha sido destacado desde que se abrió al público este año. En un principio, fue creada como un proyecto de investigación dentro de Twitter en 2019. Ante la compra de Elon Musk de la plataforma del pajarito, BlueSky se desligó completamente de Twitter.
Actualmente, la red social es valorada por sus herramientas que vigilan los contenidos que son falsos o que generan desinformación en la población. Además, los usuarios valoran las configuraciones de privacidad y un diseño que permite a los navegadores puedan controlar sus interacciones y contenidos.
La transformacionales de Bluesky corresponde a problemas con X que se relacionan con la cantidad de contenidos que generan desinformación y noticias falsas. Desde que Elon Musk tomó el control de la red, existe una reducción de la moderación bajo la premisa de “libertad de expresión”.
Bethan Davies, glacióloga de la Universidad de Newcastle, destaca que la migración hacia Bluesky ha sido masiva y que la plataforma ofrece un ambiente más acogedor y seguro para los investigadores.
Bluesky no solo entrega seguridad ante los contenidos que podrían ser falsos, sino que también ha implementado espacios dedicados exclusivamente para las ciencias, en el que cuenta con más de 14.000 seguidores y cientos de miles de visitas diarias. Además, los científicos pueden publicar sus investigaciones, hallazgos y documentos en un espacio regulado, donde son verificados antes de participar. Lo que genera una mejora en la información teniendo en cuenta la masificación de desinformación que se ve en X.
A pesar de la nueva forma de esta red social, el rápido crecimiento de Bluesky trae consigo variados desafíos. Entre ellos, el aumento de spam y estafas. Emily Liu, encargada de confianza y seguridad de la plataforma, comenta que han ampliado su equipo de moderación y fortalecen sus medidas de seguridad. A pesar de estos retos, la comunidad científica ve en Bluesky una alternativa para revitalizar el intercambio de ideas y hallazgos, lejos del ruido que domina X.