En conversación con El Mostrador, el académico de la Facultad de Comunicaciones UC y miembro del Social Listening Lab, aborda algunos elementos claves para analizar el despliegue electoral en las redes sociales y la importancia de la participación ciudadana en la conversación digital. Según el experto, uno de los indicadores más relevantes en el análisis de la influencia de los presidenciales en primera vuelta fue la diversidad de alcance de los mensajes, lo que «predecía bastante bien la mejora en las encuestas». «Los candidatos que se abrían a segmentos distintos o ampliaban su diversidad –más que la cantidad de personas, es la heterogeneidad–, se traducía en un buen desempeño en las elecciones. No es casual que hayan ganado los dos candidatos que mejor se manejaban en las redes sociales, siendo muy distintas las campañas de José Antonio y de Gabriel: eran las más ambiciosas en la manera de abarcar las redes», señala. Otro elemento relevante es entender a las redes como espacios de conversación, dejando atrás el paradigma unidireccional de los medios tradicionales y donde los espectadores pasan a convertirse en usuarios. Arriagada agrega que lo interesante «es cuando las campañas dejan que las personas interactúen» y existe «un afán conversacional» en el uso de las diferentes plataformas, que posibilita la construcción de confianza en los candidatos. Respecto al factor emocional y la construcción de «épica», puntualiza que «todavía las campañas están al debe» para lograr movilizar a quienes no votan y que, en tal sentido, habría que presentar «un sueño país» similar a lo que ocurrió en el plebiscito del 88.