El cerebro del esquema societario de Factop, el abogado Darío Cuadra, declaró sobre las sociedades del factoring en el extranjero, revelando sus nombres, abogados reclutados y años en que funcionaron. “Desconozco la existencia de otras sociedades en el extranjero, pero no las descarto”, señaló.
“La persona que más información maneja es Darío Cuadra”, dijo Rodrigo Topelberg a la Fiscalía el 28 de noviembre pasado, asegurando que el abogado de Factop era el que más conocía sobre las sociedades que los socios del factoring tenían en el extranjero, razón por la cual lo había liberado del secreto profesional para aclarar cualquier tipo de duda ante el Ministerio Público.
Las sociedades en el extranjero, como eventual ruta de dineros provenientes de Factop, ya había sido mencionada por la abogada Leonarda Villalobos, quien apuntó a que existían sociedades constituidas en Islas Canarias, Miami, Panamá y Uruguay, todas suscritas al alero de quien ha sido sindicado como el cerebro en el esquema societario de Factop: Darío Cuadra Junes.
El abogado, además, figura como representante en varias sociedades del factoring, entre ellas, STF e Inversiones Guayasamín SpA, uno de los vehículos emisores de facturas falsas más importantes del engranaje montado por la empresa y que contabiliza 321 facturas emitidas por un total de $3.661 millones.
De todos los formalizados en el caso Factop, solo Alberto Sauer y Darío Cuadra se encuentran con arresto domiciliario nocturno. Este último, según el famoso audio registrado en la oficina de Luis Hermosilla, es el único de los 51 personajes mencionados en el registro a quien Leonarda Villalobos reconoce tenerle “susto”.
Más ahora, probablemente, pues acaba de declarar sobre los viajes al extranjero que realizaba con los dueños de Factop, a quienes asegura haber asesorado en distintas sociedades de inversión constituidas en Uruguay y Panamá.
El 18 de diciembre de 2014 –aseguró Cuadra en su declaración– se enteró de la existencia de dos sociedades de inversión, propiedad de los hermanos Sauer y constituidas en Uruguay: Cribery Trading S.A. y Zasfud S.A. “No recuerdo bien a quién correspondía cada una”, señaló.
“Mi función fue coordinar el pago de los impuestos que les correspondía a los hermanos Sauer y contactarme con los abogados de Uruguay para gestionar dichos pagos que correspondían a administración, servicio de directorio y pago de impuesto anual”, precisó el abogado.
Su contraparte en Uruguay era el abogado Juan Carlos Blanco, de la oficina Blanco & Etcheberry, bufete ubicado en Montevideo, encargado de las sociedades que –según Cuadra– fueron generadas antes de que él comenzara a trabajar con Factop.
El abogado del factoring afirma que en el año 2015 realizaron un proceso de auditoría a las sociedades en Uruguay y que en un viaje realizado ese mismo año a Montevideo, junto a Daniel Sauer y Rodrigo Topelberg, decidieron cambiar de bufete, traspasando la representación a las abogadas Patricia Comañesa y María Eugenia Barreiro.
En su rol de “asesor externo”, Cuadra cuenta que entre 2016 y 2019 se mantuvo en contacto con las abogadas, quienes le reportaban sobre el pago de impuesto de las sociedades, gastos de representación y administración, entre otros servicios, hasta que a mediados de 2019 los dueños del factoring cerraron las empresas, pues a esa altura “no mantenían ningún tipo de movimiento”. Ellos eran “muy herméticos con los temas de dinero e inversiones”, comentó el abogado.
En Panamá, en tanto, los hermanos Sauer tenían Aventura Trading Corporation, una sociedad que había adquirido Factop, a raíz de una deuda de 1.000 millones de pesos con un deudor del factoring, Manuel Ugarte, quien pagó a través de la compraventa de acciones de la sociedad con sede en Panamá, dueña de una propiedad en calle General del Canto, en la comuna de Providencia.
Cuadra recuerda que la composición del directorio quedó con Ariel Sauer como presidente, Daniel Sauer como secretario y Rodrigo Topelberg en calidad de tesorero. “Además, todos quedaron con poder de firma, eso quiere decir que podían actuar indistintamente el uno del otro”, explicó.
Al menos tres veces Cuadra habría viajado a Panamá –reconocido paraíso fiscal–, reuniéndose con Jorge Troetsch, con quien perdieron contacto luego del pago de sus honorarios, y posteriormente con un antiguo abogado de la sociedad, Alexis López Navarro, quien volvió a hacerse cargo de la empresa.
La sociedad se mantuvo hasta el año 2022, fecha en que Factop dejó de pagar los honorarios de representación e impuestos en Panamá a López, ya que –según Cuadra– los socios no estaban utilizando la sociedad como tal.
“Debo señalar que las mencionadas sociedades son las únicas que conozco en el extranjero relacionadas a Factop y sus socios y me correspondió la labor de ser un puente entre los abogados extranjeros y mis exclientes, desconozco la existencia de otras sociedades en el extranjero, pero no las descarto”, señaló.
Respecto de un eventual viaje a Maimi, como afirmó Leonarda Villalobos en su declaración, Cuadra aseguró que nunca lo hizo, pero que sí acudió a Lima con los dueños de Factop, quienes buscaban abrir una filial de STF en la capital peruana.